La noche de Halloween, los grupos satánicos derraman la sangre virgen de gatos completamente negros (o blancos) a modo de «ofrenda» como rito para desear el mal a alguna persona. Las protectoras de animales toman medidas preventivas y vetan la adopción de estos felinos en fechas cercanas a la celebración.

Las prácticas crueles, los sacrificios de cultos oscuros se convirtieron en el eje central de aquellos que, durante la Edad Media y más tarde incluso, buscaban renovar y reforzar los lazos entre «ser humano» y «deidad». Los rituales, por aquel entonces, debían celebrarse en fechas fijas donde existía un acontecimiento determinado, co-mo eclipses o la entrada en nuevos siglos o milenios.

Se acerca Halloween y, como si se volviese diez siglos atrás, la noche de todos los muertos se convierte en ese acontecimiento determinado que algunos aprovechan para «ofrecer sacrificios». Hablamos de rituales satánicos en los que una minoría de personas en todo el mundo (especialmente en EE UU, aunque también en la Comunitat Valenciana), supersticiosos y seguidores del esoterismo, derraman la sangre virgen de los gatos que se convierten en la ofrenda perfecta con la que invocar el mal para alguien o «luchar contra la brujería».

Las víctimas, como han constatado durante varios años protectoras y asociaciones animalistas, son los gatos completamente negros o blancos. Sin manchas, sin «imperfecciones». Aparte, tienen que contar con otra condición: que sean vírgenes. En definitiva, se busca la «pureza».

Belén  Ortega, es activista de una organización, y explicó  que los gatos negros, debido a la ignorancia de muchas personas han sido vistos como animales con poderes místicos y en algunas culturas, se los relaciona con la magia negra y hechicería, sin embargo, no son más que mascotas que nada tienen que ver con rituales o poderes sobrenaturales.

Los gatos negros suelen llevar el estigma injusto de que son portadores de mala suerte, además de otras falsas creencias asociadas a su color de pelo. Esto comporta que su índice de adopción sea menor que el de gatos de otro color y que no sean tan apreciados.

Aunado a estas falsas creencias, los gatos negros son utilizados en crueles rituales que se relacionan con la magia negra y por ello, en estas fechas, peligran. En caso de tener un gato con tales características y disponible en adopción, los activistas recomiendan verificar antes de la familia que se lo llevará.

Destacan que es importante y si es posible, no darlos en adopción en estas fechas y esperar que pase la noche del 31 de octubre, que es cuando se registran los sacrificios de estos felinos. Si el gato ya está listo para irse con una nueva familia, es importante, revisar y, aunque sea un poco demandante, asegurarse de que tendrán los cuidados necesarios para impedir que se le cause daño.

 Destacó que temer a un gato negro es cuestión de ignorancia, así como sacrificarlos, resulta una crueldad que, con algunas leyes que se han formulado de manera reciente y válidas para la entidad, puede constituir incluso un delito.

Insistió en no dar en adopción en estas fechas y destacó la importancia de comprender que los gatos, perros y todo tipo de animal, no son juguetes, se trata de una responsabilidad que durará por años, por lo que se debe tener conciencia antes de incorporar a un elemento más a la familia.