Hace dos días se confirmó de manera formal una versión que había cobrado fuerza en las últimas semanas en el mundo de los negocios, y en un contexto en el que varias empresas de distintos rubros toman la decisión de dejar la Argentina: Brightstar, una compañía estadounidense que fabrica celulares LG y Samsung y emplea a 500 trabajadores en Tierra del Fuego, se va del país.

Desde entonces se sucedieron casi sin freno llamadas al lejano Oriente, negociaciones, más rumores y mucha preocupación de empresas vinculadas y clientes. Lo cierto es que, por estas horas, Mirgor, el principal fabricante de smartphones del país, está muy cerca de cerrar la negociación para quedarse con los activos locales de Brightstar.

Se trata de un grupo diversificado, que tiene entre sus accionistas al empresario Nicolás Caputo (aunque no participa de las decisiones operativas), con negocios de exportación de commodities –como cereales, soja, proteínas animales y derivados– y también de logística y distribución.

Hoy Mirgor tiene 40% de su capacidad industrial en uso y podría absorber la operación sin mayores inconvenientes, mientras analiza qué deudas financieras podría tener Brightstar. Incluso las marcas estarían dispuestas a pasarle directamente la producción que queda bacante. “Estamos tratando de absorber la operación y que no haya despidos”, dicen en Mirgor. La cuestión social es complicada en Tierra del Fuego, por estas horas, y en el tema están involucrados los gremios y los gobiernos provincial y nacional.

“En un gran trabajo conjunto con la Nación, el Municipio y las centrales sindicales hemos logrado garantizar la continuidad de la producción de la planta de Brightstar en Río Grande y sus 500 puestos laborales”, dijo ayer Gustavo Melella, gobernador provincial. “No hay nada cerrado aún”, avisan desde las empresas.

“Buscamos una transición ordenada, que el 100% de los empleados sigan trabajando y que el comprador mantenga los contratos con nuestros clientes y que haya continuidad con respecto a la calidad de los productos”, le aseguraron a Infobae desde Brightstar el lunes pasado.

La continuidad de los empleados es uno de los puntos centrales de la negociación. Además, se suma la preocupación de Samsung. La coreana distribuye su fabricación loca de móviles entre Mirgor (75%) y Brightstar (25%) y buscaría unificar proveedor ante la salida de la segunda. “A Mirgor tampoco le conviene que se le meta otro fabricante en este contexto”, comentó en off the record otro jugador del sector. Mientras negocian, en la empresa reconocen que son los únicos que pueden fabricar telefonía Samsung de complejidad y que, por esa razón, son los principales candidatos. Y también interesados.

“Los cambios que se están produciendo en Tierra del Fuego no afectan los planes a largo plazo que Samsung tiene en el país. Continuaremos ofreciendo nuestros productos normalmente, con la misma calidad que en el resto del mundo y a precios competitivos, como hacemos hace más de 30 años en el país”, dijeron en la empresa coreana, sin aportar más datos.

“Además de los requisitos que se le suele pedir a un socio estratégico o potencial comprador, necesitamos que tengan capacidad financiera para importar, fabricar y distribuir. Y tiene que ser aprobado por nuestros principales clientes”, aseguran en Brightstar. Esa capacidad financiera, se habla de unos USD 120 millones, y de producción pusieron a Mirgor como principal interesado.

Mirgor tiene el 40% de la producción en el mercado de fabricación local de móviles. Le siguen Newsan, muy cerca con 38%; la saliente Brightstar, con 13% y el resto se reparte entre TCL, Solnik y otros. Fabrica móviles Samsung, la marca líder del mercado argentino con un 60% de las ventas, y además en el rubro retail controla 56 puntos de venta de la marca coreana en todo el país. Este año realizó una alianza con la cordobesa Leistung y fabricó en el sur 1.100 respiradores artificiales que fueron entregados al Ministerio de Salud.

Si se concreta la operación Mirgor sumaría más del 50% de la fabricación local.

Industria local

La salida de Brightstar –que se suma a Latam, Norwegian, Glovo, BASF y a otras que también buscan socios para dejar el país, como Danone, CBS y Falabella– se da en el contexto de una industria móvil golpeada que este año venderá menos de 7 millones de unidades, el más bajo de los últimos 15 años.

Se trata de un sector que caerá, pero que no paró de vender en medio de la pandemia. Meses atrás las empresas que ensamblan en Tierra del Fuego tuvieron algunos inconvenientes para conseguir los dólares necesarios para importar desde Asia los kits con los que arman los smartphones. Esa situación estaría mayormente resuelta por estas horas, según detallan en una la industria que ahora enfrenta otro desafío a nivel ventas: el Gobierno los dejó afuera del nuevo programa de cuotas Ahora 12.

El contexto externo también aportó a la salida de Brightstar del país. Semanas atrás, el fondo Brightstar Capital Partners (BCP), que pertenece a un ex inversor de la compañía pero no tiene nada que ver con ella, le compró la mayoría accionaria de la empresa al fondo Softbank. En medio de ese proceso se está decidiendo en qué unidades y territorios invertir. “La empresa se va a reenfocar en servicios y por eso la reducción en áreas de manufacturas y distribución. También se decidió desinvertir en algunos territorios, como Brasil. Argentina está en un proceso parecido, junto a otros de la región”, afirmaron las fuentes locales de la empresa.