Tras el conflicto inicial por el incremento de un bono de fin de año que derivó en despidos masivos, ahora en medio de una conciliación obligatoria la empresa planteó en la mesa de negociación un petitorio de 8 puntos de flexibilización de las condiciones laborales.

La situación de los trabajadores de Mirgor se torna aún más complicada a partir de una medida de fuerza mal manejada y donde los márgenes de negociación se presentan todos favorables a la patronal.

Además de plantear el sostenimiento de la baja de 60 puestos de trabajo, la empresa ahora refuerza su posición con otros puntos de claro perjuicio a la parte trabajadora; el principal es el cambio de convenio de trabajo, llevándolo del ramal 4 de industria autopartista, al ramal 8 de industria electrónica.

A pesar de que Mirgor claramente tiene una orientación productiva autopartista, con este nuevo convenio busca ahorrarse un 15% de masa salarial, en detrimento del bolsillo de los trabajadores.

Incluso pretende avanzar asimismo en otros beneficios laborales, como la alimentación y el transporte en colectivo para los operarios. Las medidas fueron planteadas mediante una asamblea llevada a cabo el jueves pasado donde asistió el secretario general de la UOM, Oscar Martínez. a fin de informar a los operarios lo hablado en la mesa de conciliación.

Luego de esto el malestar se generalizó en el conjunto de trabajadores en lo que respecta a la acción sindical, considerando que del reclamo de un bono terminó en una flexibilización de sus condiciones de trabajo, y buscar sostener a duras penas sus fuentes laborales.