El padre de Nicolás Duarte Luna, se reunió en la jornada de este jueves con el juez a cargo de la causa para requerirle novedades sobre la investigación acerca de la desaparición de su hijo. Para la semana que viene se espera determinar si los restos óseos encontrados en el Cerro Michi corresponden genéticamente con los familiares de Duarte Luna.

Durante esta semana el juez Daniel Cesari Hernández reveló que los resultados de los estudios sobre los restos óseos del cuerpo encontrado han finalizado; restando conocer el estudio de ADN.

“Estamos en los plazos estipulados que nos había indicado el juez, pensábamos que era para e 20 o 25 de diciembre, pero llego la presencia de la escuela de antropología para hacer el estudio el 19 de diciembre. Enviaron las pruebas a Buenos Aires y calculamos que para esta fecha iban a estar los resultados por eso vine y en caso que se dé la confirmación dejar ya todo preparado los servicios y los tramites que correspondan hacer” comentó Carlos Duarte Luna, el padre del joven oriundo de la provincia de Buenos Aires desaparecido en cercanías de Tolhuin el 30 de abril de 2019.

Asimismo, refirió “Para la semana que viene tendríamos la confirmación del ADN, porque el estudio antropológico dio que es un varón joven adulto, y ahora esperamos las muestras genéticas que entregó la mamá, su hermano y yo”.

Por su parte relató “Lo que sabemos es que estaba en Rio Grande y se fue a Tolhuin caminando, llegó allá muy débil y una gente le dio lugar en su casa, estuvo casi 36 días ahí y le dijeron que se iban a ir de la isla y que tenía que buscar un lugar, cosa que ocurrió y se fueron, no ese momento, pero ya en junio o julio se fueron. Una tarde salió a caminar con los perros se fue al cerro y hasta hoy no sabemos nada”.

El juez a cargo de la causa Cesari Hernández informó que –a priori- descartan cualquier forma de criminalidad como causal del deceso “el juez me dice que el cuerpo que se encontró no hay rastros de que haya sido violentado, ni golpes en los huesos ni en el cráneo, no hay nada que dé certeza que eso haya ocurrido, ni siquiera que lo hayan matado los animales”.

Por último, el padre del joven comentó “Él era músico y tocaba en algunos pubs de Río Grande y de Ushuaia y evidentemente no le fue bien, se comunicó con nosotros que le empezó a ir mal y entró en una situación económica muy complicada. Hablaba que le gustaba mucho la provincia, que este era su lugar en el mundo, hablaba de todos los lugares y el paisaje, no quería irse de acá. Cuando comentó que no estaba bien, que no tenía trabajo y estaba indigente quisimos llevarlo, pero entró en un pozo depresivo y nos corría el eje todo el tiempo, no pudimos llegar, no llegamos a tiempo y sucedió todo esto”.