Alejandro Vignale, párroco del Santuario San Cayetano, ubicado en el barrio porteño de Liniers, y a cargo del cierre de la primera celebración virtual del día del Patrono del pan y del trabajo, a causa del coronavirus, aseguró que \"los santos atienden en todos lados\".

Sin los miles de fieles que acuden cada 7 de agosto al templo, el sacerdote aseguró en un reportaje con Télam Radio que \"San Cayetano no tiene ningún problema y está gustoso de ir a la casa de todo el mundo, del más alejado, el que tiene problemas, el que puede ayudar a otros, a todos. Para Dios son todos hijos, y los santos atienden a todos\".

El padre Alejandro, o simplemente \"Toto\", contó que la llegada a San Cayetano comenzó a gestarse hace casi 150 años, cuando luego de la epidemia de fiebre amarilla, en 1871, \"las Hermanas de la Santa Casa, en Independencia y 9 de Julio, se vinieron para estos terrenos\".

Y sobre el servicio que les toca durante la pandemia de coronavirus manifestó: \"A los sacerdotes nos pusieron, y a todos los ministros religiosos, en la lista de esenciales, porque tenemos que sostener el espíritu del pueblo, en medio de un momento delicado\".

En la misma línea, reflexionó que están viendo \"por comunicaciones, por llamados, por los chats, por encuentros, por donaciones, que el estado de ánimo a veces está más o menos y tenemos que ayudar\".

\"En este contexto de pandemia, en este momento social delicado, desde el Santuario de San Cayetano, vamos a pedir una gran bendición, pero también la bendición grande que pedimos es que en el corazón de todos aprendamos de San Cayetano, aprendamos la solidaridad, aprendamos a tender puentes, y aprendamos como él, que supo atender la delicadeza de salud en epidemias y en pestes que hubo en su época\", señaló el párroco.

Asimismo, el párroco dijo que \"le están poniendo mucha fuerza\" porque la pandemia también hizo que se \"multiplique la asistencia a la gente necesitada\".

El religioso, además, contó que este año el mensajes que dan a los fieles, será \"junto a San Cayetano, confiamos en Dios y nos ponemos en sus manos\".