La escena se repite: scroll de playas en Instagram, pestañas abiertas con vuelos y una cuenta mental para ver si alcanza para cruzar la frontera o hacer Costa Atlántica. En un año atravesado por la inflación y el ajuste, la clase media ya arma el mapa de sus vacaciones… con un ojo puesto en la política y el dólar.
El dilema del momento: anticiparse o apostar a después de las elecciones
Entre economistas y operadores turísticos, el mensaje es casi unánime: quien pueda, compre ahora. Carolina Berardi, analista y docente, lo sintetiza así: “Conviene cerrar en dólares al tipo de cambio oficial. Después de las elecciones habrá cambios en el régimen y el dólar tendería a subir”. Para quienes no recuperan percepciones de Ganancias, agrega, pagar con dólares propios evita esperar reintegros y elimina sorpresas.La lectura detrás de esa recomendación es conocida: con un oficial difícil de sostener a mediano plazo, el mercado descuenta una corrección del tipo de cambio tras los comicios.
Vuelos dentro del país: cuotas hoy, recalculo mañana
El panorama doméstico no es tan distinto. Juan Louge, del sector turístico, advierte que todavía se encuentran planes en cuotas para cabotaje por acuerdos entre bancos y agencias, pero esa ventana podría achicarse. La lógica: congelar hoy el valor del pasaje nacional y resguardarse de eventuales recomposiciones tarifarias después de octubre.A esto se suma un dato incómodo: en dólares, Argentina luce cara, por lo que muchos viajeros miran afuera. En la Feria Internacional de Turismo sonó la alarma: si el dólar sube, la financiación podría encarecerse. De hecho, varias agencias ya ofrecen una rareza para el mercado local: hasta tres cuotas en dólares.
Exterior: los imanes del momento
Las estadísticas del sector muestran que viajar afuera volvió a acelerarse. En la región, Brasil, Uruguay y Chile encabezan las preferencias:
- Brasil, más devaluado, deja precios de consumo más amables para argentinos.
- Uruguay funciona como refugio premium: orden y previsibilidad, con valores más altos.
- Chile recuperó terreno por cercanía y oferta de vuelos.
Un año de fuerte salida de divisas
El telón de fondo ayuda a explicar la prisa por decidir: con recesión mediante, el primer año de la gestión Milei cerró con un drenaje récord de divisas. Entre 2023 y 2024, utilidades, dividendos y pagos al exterior se triplicaron —de $6 billones a $17,6 billones— y turismo y consumo afuera volvieron a empujar fuerte ese caudal.
¿Entonces, cuándo comprar?
Para Florencia Fiorentin (EPyCA), la regla no cambió: “Cuanto antes, mejor”, tanto para destinos locales como internacionales. El riesgo hoy no está en anticipar, sino en esperar demasiado y encontrarse con un combo devaluación + inflación + ajuste de tarifas aéreas.
Cómo se está pagando hoy
- Cabotaje en pesos: cuotas fijas y, según banco, hasta 12 pagos.
- Paquetes al exterior en dólares: algunas agencias ofrecen 3 cuotas en USD.
- Compra de dólares oficiales para pagar: evita el 30% en tarjeta, pero requiere billete.
¿Y las promos de último minuto?
Existen y tientan, sobre todo cerca de fechas clave para completar aviones. Pero es un juego de alto riesgo: pocas plazas, horarios incómodos y probabilidad baja de que coincidan con el plan familiar de verano. En temporada alta, la chance de pescar un “error fare” se achica aún más.
Por qué el turismo no aflojó
Aun con salarios reales en baja, el consumo privado viajó mejor de lo esperado en escapadas, cabotaje y exterior. Pesa la necesidad de cortar con meses difíciles, el miedo a una devaluación que encarezca todo de golpe y el peso cultural de las vacaciones como ritual irrenunciable.
La síntesis
- Si tenés decidido el viaje, cerrar ahora te protege de un posible salto cambiario y asegura disponibilidad.
- Para cabotaje, aprovechá cuotas mientras sigan vigentes.
- Para el exterior, evaluá pago en USD o cuotas en dólares según tu flujo.
- Apostar al último minuto puede salir bien… o costarte más caro y sin lugar.
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