A raíz del violento episodio que se registró en la madrugada del 25 de diciembre en el local nocturno ‘Maldito Ibiza’, sito sobre la Avenida San Martín esquina 25 de mayo en la ciudad de Río Grande, el día de ayer, Leonardo Damián Legüe Durán de 22 años de edad, se negó a prestar su declaración indagatoria y la Jueza de Instrucción, la Dra. Cecilia Cataldo formalizó que este joven se encuentra imputado bajo el delito de “lesiones graves”.

Recordemos que, este joven fue identificado como el autor de arrojar un pedazo de concreto que lamentablemente golpeó en la cabeza a Micaela Ibarra de 21 años, la cual en ese momento se desvaneció y perdió una gran cantidad de sangre producto del impacto. De forma posterior, la joven fue llevada hacia el Hospital Regional de Río Grande, donde al ser suturada de forma errónea, se solicitó la intervención de otro médico quien fue el que solicitó estudios más complejos dado a la gravedad dl politraumatismo. Micaela debió será derivada a la Clínica ‘San Jorge’ de Ushuaia dado a la complejidad de su pronóstico ya que, sufrió un hundimiento de cráneo, fractura de maxilar, perdida de la visión en un ojo y se prevé colocarle placas de titanio en la cabeza una vez que baje la inflamación.

Es por ello que, tras un arduo trabajo de investigación, se logró identificar mediante las cámaras que el agresor había sido el joven Leonardo Damián Legüe Durán de 22 años, el cual hace dos días atrás se encuentra en calidad de detenido.

En el transcurso del día de ayer, la Jueza de Instrucción Cecilia Cataldo, quien está de turno durante la Feria Judicial, fue la encargada de tomar la declaración indagatoria ante la audiencia realizada en Tribunales y fue allí donde Leonardo Damián Legüe Durán se negó a declarar. De igual forma, la magistrada Cataldo formalizó la imputación por el delito de lesiones graves por el hecho ocurrido en el local bailable “Maldito Ibiza”.

A su vez, el Defensor Oficial de Leonardo Damián Legüe Durán, solicitó la excarcelación y basó el hecho a un escenario “fortuito” a raíz de que el imputado y la víctima no se conocían, y sostuvo que la intención de su defendido era provocar daños al local bailable, no a la joven.