El buen desempeño del último fin de semana extralargo volvió a poner al turismo en el centro de la agenda económica. Según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), el descanso de cuatro días por el traslado del Día de la Soberanía Nacional movilizó a 1,64 millones de turistas, que generaron un gasto total estimado en $355.789 millones, un 34% más en términos reales que el año pasado. La estadía promedio alcanzó las 2,3 noches, también por encima de 2024.

Con esos números como respaldo, en la Casa Rosada comenzaron a evaluar la posibilidad de repetir la fórmula en diciembre. La idea que circula entre funcionarios nacionales es crear un nuevo fin de semana largo inmediatamente antes del feriado del lunes 8 de diciembre, Día de la Inmaculada Concepción de María.

La alternativa que se analiza consiste en declarar no laborable el viernes 5 de diciembre, lo que daría lugar a un bloque de cuatro jornadas consecutivas de descanso y permitiría extender la temporada de escapadas cortas en todo el país. El objetivo principal sería reforzar la actividad de hoteles, gastronómicos y operadores turísticos, en línea con la estrategia de impulsar el consumo interno.

El rumor ganó fuerza en las últimas horas del martes, luego de que distintas cámaras empresarias insistieran en la conveniencia de sumar un nuevo puente turístico antes de fin de año. Para el sector, la experiencia de noviembre demostró que los fines de semana largos siguen siendo una herramienta efectiva para mover la economía regional.

De todos modos, hasta ahora no se conoció ningún decreto oficial ni comunicado del Poder Ejecutivo que confirme la medida. La eventual declaración del viernes 5 como día no laborable aún está en estudio y, por el momento, el calendario de feriados de diciembre mantiene al 8 como única fecha de descanso asegurada.