Con el objetivo de transformar la experiencia de los usuarios y responder a uno de los reclamos más frecuentes —el alto costo de la nafta—, la empresa YPF lanzará un plan innovador que permitirá reducir el precio del combustible mediante el uso de inteligencia artificial.

A partir del 24 de junio, la petrolera nacional pondrá en marcha su nuevo Centro de Inteligencia en Tiempo Real (RTIC), que estará ubicado en Puerto Madero. Desde allí, se llevará a cabo un monitoreo constante del movimiento en las estaciones de servicio para ajustar los precios según la demanda.

Uno de los ejes centrales del programa es ofrecer precios más accesibles fuera del horario pico. En esas franjas, por ejemplo durante la madrugada, la compañía aplicará descuentos como incentivo para atraer clientes y optimizar la operatividad del personal en momentos de baja concurrencia.

La estrategia apunta a redirigir el flujo de vehículos hacia momentos del día en los que el caudal de clientes es mínimo. Desde la firma explicaron: “Si sabés que a las 3 AM una estación está vacía, te conviene incentivar el consumo en ese momento antes que tener al personal sin actividad. Eso es posible gracias al análisis inteligente en tiempo real”.

Este plan forma parte de una transformación más amplia que busca modernizar la red de estaciones de YPF, mejorando la eficiencia operativa y adaptándose a patrones de consumo con el respaldo de tecnología avanzada.

La propuesta también contempla una segmentación dinámica de precios que podría extenderse a otras franjas horarias y ubicaciones, siempre basándose en datos proporcionados por el sistema. De este modo, YPF aspira a competir en un mercado cada vez más sensible al precio y a la experiencia del cliente.

Este cambio en la política de precios podría marcar un antes y un después en el sector energético argentino, especialmente en un contexto donde la inflación y los costos del transporte afectan de forma directa a los consumidores.

Con esta iniciativa, YPF apuesta a convertirse en pionera en el uso de inteligencia artificial aplicada al mercado de combustibles en la región, al tiempo que busca aumentar su competitividad frente a otras empresas del rubro.