Elizabeth Bahamonde es la madre de un niño de 13 años el cual asiste a la Escuela Especial Nº2 en la ciudad de Río Grande.

Lautaro vive en el barrio Bicentenario y todos los días es trasladado en el transporte de gobierno a la Escuela Especial ubicada en el barrio de Chacra II. En la jornada de ayer Elizabeth fue a los pocos minutos al colegio luego de que su hijo llegara, ya que ella quería saber si los maestros de su hijo habían ido a trabajar.

Para sorpresa la madre al llegar al colegio su hijo presentaba un golpe en la cara, “cuando llegue me encuentro con un señor que está siempre en el área de Biblioteca, junto a él estaba la Vicedirectora, y mi hijo. El mismo estaba de espalda viendo algunos videos, cuando salgo de ese lugar la Vicedirectora Alejandra Díaz me dice si me puedo quedar, pero le dije que no porque me tenía que ir a trabajar. Ella me dice que tengo que llevar a mi hijo al Doctor, ya que le dolía mucho un dedo, yo al mirarlo le veo un hematoma a dos centímetros de su ojo. Yo le consulte que le paso, pero él no me pudo decir nada, ya que su lenguaje es muy limitado por la patología que presenta”.

La madre continuó diciendo que ella consultó a los directivos que era lo que le había pasado a Lautaro, pero Díaz solo dijo que los padres eran testigos que ella no le había hecho nada y que jamás lo tocó. La madre agregó que “ante esta situación llame a la Policía, quienes me aconsejaron que lleve a mi hijo al Hospital, y que de ahí realice la denuncia. Esto va a continuar por las vías judiciales, quiero saber que le pasó. Yo también hable con el hombre que lo lleva en la combi, ellos me dijeron que mi hijo llegó feliz y contento y que no tenía ningún golpe”.

Elizabeth explicó que en la actualidad en la ciudad no hay un psiquiatra infantil, pero que el año pasado el profesional que estaba le indicó que “no estaba sugerido que mi hijo vaya a la escuela, ya que él pega y casi no habla. La Directora me hicieron una denuncia porque mi hijo no estaba escolarizado”.

Indicó que va a presentar notas para solicitar que pongan cámaras en todas las escuelas, “si los docentes no tienen nada que esconder deben dejar que las coloquen. Yo en mi casa tengo cámaras para ver qué es lo hace mi hijo mientras yo cocino” explicó la mujer.