Sabrina, una de las vecinas afectadas, contó que sufrió dos robos en el último mes, con apenas una semana de diferencia entre ambos. “Hice la denuncia, pero todavía no hay novedades. Me robaron una notebook, una guitarra, una cámara Nikon, una GoPro y hasta una cámara de seguridad que no estaba conectada”, relató. Además, indicó que los hechos no se limitan a viviendas deshabitadas: “Entraron a casas con gente durmiendo, incluso armados. En otros casos intentaron robar autos”.

La vecina afirmó que el barrio carece de presencia policial permanente, y que los patrullajes son esporádicos. “Nos dijeron que la comisaría Quinta no da abasto porque cubre varios barrios. Pero nosotros necesitamos que este sea más patrullado, porque ya es una seguidilla de robos y daños que no da para más”, reclamó.

Otro de los residentes coincidió en que la situación “ya llegó al límite del cansancio”. Explicó que, con el crecimiento del barrio, los hechos delictivos dejaron de ser aislados: “Antes eran hurtos a obras o viviendas en construcción, pero ahora ingresan a domicilios con gente adentro. La preocupación es distinta y el miedo está presente todos los días”.

Los vecinos señalaron también que la falta de infraestructura y accesos seguros contribuye al problema. “Somos un barrio más allá de la circunvalación, y hay problemas de jurisdicción entre la municipalidad, la provincia y Vialidad Nacional. Los accesos están sin iluminación y son de ripio. Además, circulan camiones a alta velocidad cuando el límite es de 40”, explicó uno de ellos.

El reclamo incluye la instalación de cámaras de videovigilancia en los cuatro accesos principales al barrio, que podrían ser monitoreadas desde el centro de control policial. “La policía siempre nos pide las grabaciones de las cámaras particulares, pero no todos los vecinos las tienen. Sería importante que la municipalidad coloque cámaras en los accesos”, propusieron.

Finalmente, los vecinos remarcaron que muchos de los actos vandálicos son cometidos por menores de edad, tanto del propio barrio como de zonas aledañas. “Rompieron vidrios, árboles, la plaza del barrio está siempre dañada. Es una situación que se repite”, lamentaron, al tiempo que pidieron una respuesta concreta de las autoridades para evitar que la inseguridad siga avanzando en el sector.