El Ingeniero Paulo Gea, jefe del INTA en Río Grande, dialogó con Radio Fueguina sobre la llegada de los pollitos para la entrega a los inscriptos en el programa avícola “fue un esfuerzo sobrehumano para traerlas, el avión no me las dejó cargar porque hay mucho menos vuelos”.

Agregó “siempre llegan en noviembre, pero finalmente arribaron en febrero. Una vez que no suben los pollitos ya nacidos, se reparten en otras localidades de Buenos Aires”. En una encuesta realizada, “se registró que a la gente se le morían muchos pollitos por distintas circunstancias de cuidado, para que esto no suceda hablamos con los Municipios de las tres ciudades, con el fin de conformar un centro de crías, donde los alimentamos, les damos agua y cuidado veterinario durante un mes”, luego de ese tiempo el ave crece y se hace mucho más fuerte, para finalmente se haga la entrega "prácticamente de una gallina”.

Aclaró que particularmente este año, trajeron “2.000, los que se repartieron 700 en Río Grande, misma cantidad en Ushuaia y 400 aproximadamente en Tolhuin”. Cabe destacar, que la entrega es para aquellos inscriptos en el programa que se divide en dos partes, una tanda es para los productores avícolas, “que venden huevos, se le otorga una mayor cantidad de pollos y asistencia técnica veterinaria”, pero “la otra se maneja desde el programa Pro Huerta, donde se reparten como máximo hasta cinco pollitos por familia”.

Para aquellos interesados en inscribirse para la próxima tanda, pueden comunicarse con ellos en la al momento del reparto de semillas en el inicio de temporada o contactarse por la página de Facebook “INTA-ProHuerta Tierra del Fuego”.