Una vez más, la Obra Social del Estado Fueguino (OSEF) queda en el centro de la polémica por las demoras en la atención de afiliados con cuadros de salud delicados. En esta oportunidad, José Valor y su hija Damaris hicieron público su caso en Aire Libre Fm, donde denunciaron la falta de respuestas de la obra social pese a que existe un recurso de amparo que ordena agilizar su operación.

José padece claudicación invalidante grado 2 en su pierna izquierda, lo que le impide caminar más de media cuadra y le provoca fuertes dolores y calambres nocturnos. “Me dijeron en marzo que debía operarme de urgencia porque si no me ponen la prótesis, puedo perder la pierna”, explicó. Desde entonces, asegura, lo único que ha recibido son derivaciones, excusas y negativas a cubrir cuestiones básicas como la consulta con el especialista.

Según relataron, OSEF inicialmente lo derivó al doctor Guillermo Lacour, pero como él no realizaba la intervención, le recomendaron al cirujano Dotti en Ushuaia. La obra social reconoció la cobertura de la operación —valuada en unos 45 mil pesos—, pero no de la consulta médica previa, lo que obligó a la familia a cubrir ese gasto de su bolsillo. A esto se suma un diagnóstico de EPOC avanzado, cuyo tratamiento tampoco logra acceder regularmente porque, aunque OSEF afirma cubrir el 70% de la medicación, las farmacias se niegan a entregarla por falta de pago de la obra social.

“Presentamos un recurso de amparo en agosto y hasta la médica forense del Poder Judicial validó que la operación es urgente, pero OSEF sigue sin cumplir”, señaló Damaris. La familia denunció también que el entonces delegado de la obra social, Cristian Svetlitser —quien recientemente presentó su renuncia—, nunca les brindó soluciones concretas.

El caso de José no es aislado: en los tribunales abundan los amparos contra OSEF por demoras, falta de cobertura y medicamentos que desaparecen de las farmacias cuando se presentan recetas de la obra social, pero reaparecen si el paciente paga de manera particular.

Mientras tanto, la salud de José se deteriora con el paso de los meses. “En marzo estaba mejor que ahora. Hoy camino diez metros y ya me duele toda la pierna. A la noche no puedo dormir de los calambres”, describió entre lágrimas. Su hija insiste en que solo buscan que se cumpla la orden judicial: “Es urgente desde marzo, y ahora estamos en octubre”.

La denuncia pública busca visibilizar una situación que, según testimonios recogidos en el mismo programa, afecta a numerosos afiliados. La incertidumbre y el malestar crecen en torno a OSEF, una obra social que, pese a recibir millonarios aportes, no logra garantizar la atención médica esencial de sus beneficiarios.