La presidenta de la Asociación Rural de Tierra del Fuego, Lucila Apollinaire, dialogó con FM Masters donde brindó un balance de la situación actual que atraviesa el sector rural de la provincia.

En primer lugar, se refirió al nuevo ataque de dos perros sobre las dos llamas que viven en el Club de Campo La Cimarrona y sostuvo que este lamentable hecho “puso en arena el tema de los perros asilvestrados y de aquellos sin supervisión y control en las ciudades. A veces cansa porque parece que hace más de 30 años estamos con la misma queja y sonamos mala onda, pero la verdad es que un problema que va incrementándose cada vez más y afectó seriamente la producción la zona del ecotono de Tierra del Fuego. En algunos establecimientos no hay ovejas y en otros muy pocos para alimentarse de forma individual.”

En este sentido, agregó que “ya hay ataques a personas, a terneros, a guanacos y a distintas especies de fauna porque los perros asilvestrados ya forman parte lamentablemente de nuestro paisaje y ninguna especie está a salvo de ellos. Hace varios años se sancionó la Ley 1146 que es para el manejo de las poblaciones caninas en Tierra del Fuego y debido a la falta de política de Estado firme que no tenemos, la verdad es que sería más fácil. Dependemos de la buena voluntad de los distintos funcionarios y signos políticos cuando asumen. Esta ley desde hace tiempo que no se cumple, pero en la última reunión que se realizó, encontramos que hay fondos destinados a la investigación científica para poder dar algunas soluciones. Desde el 2022 que no se llamaba a esta reunión y desde diciembre, cuando reasumió el gobierno del gobernador Gustavo Melella se volvió a intentar y por suerte logramos que el martes 30 tendremos la primera reunión en mucho tiempo de esta mesa de la ley 1146.”

“En el campo seguimos trabajando y seguimos haciendo lo que nosotros podemos en las estancias porque hay medidas que uno puede tomar para mitigar este problema, pero necesitamos el acompañamiento de las zonas urbanas porque no tiene sentido estar trabajando con el problema en el campo si en las ciudades siguen saliendo estos perros de forma permanente y continúa”.

Apollinaire remarcó que “entre reunión y reunión, deben suceder cosas para que cada uno haga su tarea. Sabemos que va a haber veterinarios en la reunión, el arco de legislación, universidades, productores y gente de salud. Este problema es muy grave que abarca a muchos organismos como CADIC-CONICET. Queremos retomar el martes para ver en qué punto habíamos quedado y a partir de ahora empezar a trabajar de nuevo. En el 2023, los fondos que estaban destinados para esta ley, no se usaron y volvieron a rentas. Hablamos con el ministro de Economía y nos confirmó de que esos fondos podrán volver a utilizarse y son más que nada para manejarse en terreno y que los científicos puedan detectar las zonas donde están los perros.”