La situación del sector textil en Tierra del Fuego atraviesa uno de sus momentos más críticos. Luego del cierre de la planta Blanco Nieve en Río Grande, que dejó sin empleo a 35 trabajadores, el presidente de la Cámara Fueguina de la Industria Nacional (CAFIN), Alberto Garófalo, advirtió que el panorama para las empresas del rubro “es dramático” y que podría haber más cierres en los próximos meses.

Garófalo explicó en Radio Provincia que Blanco Nieve “venía arrastrando problemas hace tiempo” debido a la pérdida de mercado frente a productos importados de países como China, Pakistán y Bangladesh, que ingresan al país “sin precios de referencia, sin controles anti-dumping y a valores imposibles de igualar”.

El dirigente señaló que esta situación se agrava por las incertidumbres en el régimen promocional fueguino, particularmente tras el decreto 594, que nunca fue reglamentado completamente. “Hoy nos manejamos con una interpretación arbitraria que fija un cupo fiscal en pesos no actualizable. Eso deja a todas las empresas sin beneficios”, explicó.

Una de las firmas más comprometidas es Sueño Fueguino, que mantiene 27 camiones con mercadería sin poder salir de la provincia y enfrenta reclamos impositivos. Garófalo sostuvo que “la interpretación actual del decreto carece de sustento legal” y que las empresas recurrirán a la Justicia, aunque advirtió: “El problema es el tiempo; cuando se gane, ya puede ser demasiado tarde”.

Actualmente, quedan unos 500 trabajadores textiles activos en la provincia, pero Garófalo estima que a partir de febrero de 2025 la situación será insostenible si no se corrige la política vigente. “Las compañías no podrán resistir los reclamos fiscales y el recorte de beneficios. Lo que estamos viendo es el comienzo del fin de la actividad textil en Tierra del Fuego”, alertó.

El titular de CAFIN también cuestionó la falta de diálogo político con Nación y pidió una reacción urgente: “Hay que dejar de lado los colores partidarios. Si no se sientan a discutir provincia, intendentes, legisladores y el gobierno nacional, el daño será irreversible”.

Finalmente, Garófalo recordó que el sector industrial de la provincia incluyendo electrónica, plástica y textil mueve más de 27 mil millones de pesos mensuales y genera miles de puestos de trabajo directos. “No se puede suponer que desaparecida la industria los empleos se van a recuperar mágicamente con otra actividad que ni siquiera existe todavía. Hay que discutir con seriedad el futuro del régimen”, concluyó.