La realidad económica argentina viene en franca caída hace un tiempo, con medidas que buscan fortalecer la moneda nacional que, a nivel regional perdió competitividad ante la de otros países que tiempo atrás resultaban convenientes para los turistas argentinos en naciones vecinas como Uruguay, Brasil y, sobre todo para los patagónicos, en Chile, donde antes era una costumbre realizar un viaje de compras para hacerse de todo tipo de bienes y artículos.

Las casas de cambio de Punta Arenas exhiben el valor más bajo del cambio respecto de su moneda y el peso argentino que se encuentra a 2,1 para la compra y 2,5 para la venta, situando a la moneda nacional en una competitividad que hace poco conveniente viajar hacia la vecina ciudad cabecera de la región de Magallanes.