El Director del Servicio Penitenciario Provincial, Doctor Claudio Canovas, se refirió a la situación de la Unidad de Detención N° 1 de Río Grande, donde actualmente permanecen 118 internos, el doble de la capacidad para lo cual fue habilitada, por esta razón se sumaron nuevos espacios físicos con la apertura de nuevos pabellones y así descomprimir la situación. Por su parte se refirió a la población de internos federales, en prisión preventiva y procesados en las penitenciarías de la provincia.

“Hace poco inauguramos un pabellón que nos vas permitir distribuir mejor a los internos, para que estén más cómodos ellos y también al personal y funcionarios que trabajan ahí. La idea es ampliar la unidad por lo menos con dos pabellones más, porque lamentablemente la población carcelaria va creciendo y eso tenemos que pensarlo así, a futuro hacer una ampliación”, precisó el Director de Servicio Penitenciario respecto a la ampliación dada en Río Grande.

En relación a los porcentajes actuales de internos alojados de la Unidad de Detención N° 1 de Río Grande indicó que “Hoy hay 118 reclusos, desde los tres años que vengo trabajando en esto, recuerdo que cuando asumí teníamos 96 internos, subió ese porcentaje y se ha mantenido con el ingreso y egresos de algunos que han ido obteniendo beneficios”.

A continuación, el director informó que los internos federales en Tierra del Fuego son detenidos cuando se está en una etapa de proceso judicial, una vez que son condenados por el tribunal oral, los mismos son trasladados fuera de la provincia. “Tenemos un gran porcentaje de internos federales, en la provincia hoy estaremos en 38 internos federales, en lo que se trabaja es que una vez que tengan firme la condena del tribunal en lo federal, se los trasladan”.

En el caso de cifras de alojados con prisión preventiva y procesados en espera de condenas, Cánovas manifestó, “no son muchos, estamos hablando de un porcentaje bajo, pero si el 40% de la totalidad de los internos en la provincia están en calidad de procesados, en espera que salga el juicio para recibir su condena”, argumentó.

En otro orden de cosas y en cuanto al ingreso de un condenado, el funcionario explicó: “Nosotros trabajamos para que el interno dentro de la unidad pueda comprender y respetar la ley para que el día de mañana cuando estén en la sociedad sean mejores personas. Ese es el lema nuestro, trabajar con el procesado y con el condenado de la misma manera, hoy sabemos que la norma 2460 nos impone una manera de trabajar con el procesado que cambia un poco al trabajo con el condenado, pero en lo que respecta inculcar valores, trabajo, educación lo trabajamos de la misma manera con todos”.

Por último, apuntó a los índices de violencia en la cárcel de Río Grande como en las de Ushuaia, “eso ha bajado muchísimo, como siempre digo, trabajamos en la cárcel y algún problema vamos a tener, pero por suerte los incidentes que tenemos son menores. Por ahí hay conflictos que vienen de afuera y los trasladan adentro, pero sinceramente han bajado muchísimos los conflictos dentro de las unidades”.