El secretario de Finanzas del Municipio de Río Grande, contador Oscar Bahamonde, confía en las gestiones que se están realizando con el gobierno provincial, para lograr que salde la deuda de coparticipación antes de fin de año.

Todavía el fideicomiso austral debe girar los 35 millones que adelantó el Municipio de fondos propios, para reactivar la obra de la planta potabilizadora, y se suman alrededor de cien millones de deuda de coparticipación.

Respecto de los fondos del fideicomiso para la planta, “por las averiguaciones realizadas, se completaron los pasos administrativos para el pago y estaría por liquidarse la orden al Municipio. Ya es una cuestión de disponibilidad de fondos de Nación para pagar las obras financiadas por el fideicomiso austral”, dijo Bahamonde a Radio Universidad.

Recordó que ese adelanto de fondos propios, ante la demora que tenía el fideicomiso luego del cambio de gobierno, “se pagó a fines de abril”, con lo cual llevan siete meses de retraso para lograr recuperar el dinero, más el tiempo que ya se arrastraba de los meses previos.

El funcionario centró la preocupación en la deuda del gobierno, que supera el mes de coparticipación que le corresponde al Municipio. “Estamos en tratativas para el pago de los saldos definitivos de coparticipación y tenemos para cobrar todo el primer semestre del 2016, porque no cobramos los definitivos de este año. Parte se pagaría con fondos de la soja y estamos en tratativas para ver también cuánto se puede cobrar con fondos de libre disponibilidad”, sostuvo, dado que los fondos de la soja se pueden usar solamente para obra pública y la administración necesita liquidez para gastos corrientes, sin condicionamientos como son los fondos que deberían girarse regularmente.

Bahamonde estimó que hay “alrededor de 35 millones de pesos a cobrar solamente en definitivos que corresponden al primer semestre del año, y esperamos cobrarlos antes de que finalice el ejercicio”.

En cuanto a la coparticipación por liquidaciones diarias, “estamos rondando un mes de atraso”, advirtió.

“Estuvimos hablando con el Ministro de Economía y van a tratar de hacer el esfuerzo para reducir los días de atraso, de acuerdo a lo que venga ingresando de acá a fin de año. En total, entre atrasos de liquidaciones diarias y saldos definitivos de coparticipación, siempre rondamos los 100 millones de pesos como mínimo, como acreencias al Municipio”, precisó el funcionario.

Consultado sobre la deuda con proveedores del municipio, dado que esta demora del gobierno trae consecuencias, dijo que “tratamos de tenerlos al día en lo posible. A veces hay atraso por el propio circuito administrativo. Lo normal que puede llevar la tramitación de un expediente, está dentro de los 30 días que marca las contrataciones que maneja el Municipio”, aseguró.

En cuanto a las razones de esta deuda que sostuvo la gestión Bertone todo el año, indicó que “el motivo siempre es la disponibilidad o no de los fondos por parte de la provincia”.

Para el Secretario la solución sería el goteo diario: “Lo más sano para esto es que exista un régimen de goteo diario, porque directamente sería el banco el que realizaría cada acreditación y la distribuiría en los municipios. Luego quedarían los definitivos para hacer un ajuste final, pero dejaríamos de tener estos atrasos, que se mantienen”, expresó.

Se le preguntó al funcionario si será necesario pedir algún tipo de adelanto para pagar los aguinaldos, dado que el gobierno gestiona ayudas extraordinarias de Nación. Respondió que “no son necesarios porque estamos hablando de que el gobierno tiene retrasos de alrededor de 100 millones de pesos. Lo que pedimos es que ingresen los recursos que corresponden. Con eso no necesitamos pedir ningún tipo de anticipo”.

Mientras el gobierno adeuda millones de coparticipación, son rigurosos los descuentos que se aplican y hay acciones que persiguen la devolución de los que corresponden al fondo solidario, al no haber adherido el Municipio.

“Hasta que se resuelva eso veremos las acciones a seguir”, dijo, observando que se da “una colisión” de normativas, entre la ley que lo establece, adhesión mediante, y la ordenanza que lo rechaza.

Bahamonde detalló que al margen de este fondo, “nos descuentan un pago a cuenta de la deuda con el IPAUSS y son 500 mil pesos todos los meses, de acuerdo a la ley 1068, que dice que hasta que se confeccione un plan de pago, los municipios de Ushuaia y Río Grande deben aportar 500 mil pesos”.

“Otro descuento que se hace todos los meses es el 50% de la liquidación de cada día, hasta completar la masa de aportes previsionales. Eso se viene cumpliendo todos los meses y luego el Ejecutivo provincial debe depositarlo en las cuentas del IPAUSS”, agregó.

Se le preguntó si estos depósitos se hacen como corresponde, y reconoció que “muchas veces se generan conflictos con el IPAUSS por atrasos. El IPAUSS dice que el deudor es el municipio, cuando es la provincia la que paga tarde. Hay una ley que dice que la provincia es la que retiene los fondos y no puede ser responsable el municipio por la fecha en que se depositan. Esto fue llevado a la justicia con éxito pero muchas veces intentan poner en cabeza de los municipios los intereses que generan los atrasos”, dijo.