El proyecto "H2 Magallanes", impulsado por Tec H2 Magallanes SpA, ingresó esta semana al proceso de evaluación ambiental en Chile. Con una inversión estimada de más de 16.000 millones de dólares, la iniciativa busca instalar una planta de producción de amoníaco en la comuna de San Gregorio, a unos 10 kilómetros de Punta Delgada y 200 kilómetros al noreste de Punta Arenas.

La futura planta combinará nitrógeno obtenido del aire con hidrógeno generado mediante electrólisis, utilizando electricidad proveniente de energía eólica y agua de mar desalada. El amoníaco producido se destinará principalmente a la exportación a través de un puerto especialmente construido para el proyecto.

El plan incluye no solo la planta de amoníaco, sino también un parque eólico de 5 GW, centros de electrólisis, una planta desaladora y sistemas de almacenamiento que contemplan ocho estanques de gran capacidad. Se estima que, en su fase operativa, podrá producir hasta 10.800 toneladas diarias de amoníaco.

El cronograma establece una construcción de seis años, con inicio previsto tras la habilitación de un campamento temporal. La operación se extendería por 25 años y el cierre demandaría otros dos años adicionales.

El gerente general de Tec H2 Chile, Antoine Liane, destacó que el Estudio de Impacto Ambiental es fruto de más de tres años de trabajo junto a autoridades nacionales y regionales, así como de instancias de diálogo con la comunidad local. “El proyecto busca producir hidrógeno y amoníaco verde respetando el medio ambiente y trabajando en armonía con las comunidades”, señaló.

Durante la etapa de construcción se espera emplear entre 8.000 y 10.000 trabajadores y movilizar recursos a gran escala, incluyendo 700 aerogeneradores, 700 mil toneladas de cemento y 300 mil toneladas de acero.

La iniciativa representa el mayor proyecto de su tipo tramitado hasta ahora por el Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental de Chile, superando incluso al proyecto HNH Energy.