Antony es un joven de la ciudad de Río Grande que ante la falta de trabajo se la rebusca y vende helados en las calles junto a su abuela de 68 años. Gracias a la recaudación de los helados pudo comprar unos lentes que necesitaba.

En diálogo con Minuto Fueguino el joven comentó “Estoy muy contento, estamos tratando de llegar a más gente, estoy contento de que la gente se acerque a comprar helados. Esta difícil la situación en la Argentina. Yo soy de Perú y llegué hace diez años acá a la isla, Tierra Del Fuego le abrió las puertas a mi familia”

Y agregó “Esto inició dos meses atrás comenzamos con los marcianos, que acá les llaman juguitos de sabor. Tenemos una variedad de sabores, y siempre estamos parados en Thorne y Almafuerte”

“La gente siempre pasa y nos recomienda, tratamos de lucharla día a día porque esta es nuestra salida laboral” dijo.

“El precio de los helados es de $40 la unidad o 3x$100 siempre estamos desde 14 hasta 22 horas”