Julia, la abuela del niño que se accidentó el pasado 9 de septiembre en su domicilio ubicado en la calle Patagonia del barrio Chacra II, informó que hoy su hija y su nieto se encuentran en perfectas condiciones y relató cómo fue el hecho en el cual ambos sufrieron una descarga eléctrica tras querer enchufar una heladera que anteriormente había sido desinfestada.

La abuela de este niño comenzó diciendo que “Fue alrededor de las 19:00h, cuando me llama mi hija desesperada diciéndome que, si la podía ir a buscar para llevar a mi nieto que había tenido un accidente, le había agarrado la electricidad”, agregando que “salgo desesperada y paso a buscarla. Al acercarme ella ya me estaba esperando afuera y ella me cuenta que estaba limpiando la heladera y tenía las manos húmedas, por ende, al tocar el enchufe con un trapito húmedo, es donde ella sufre la descarga”.

“Pero al sufrir esta descarga la joven de 20 años no estaba sola, sino que junto a ella estaba su hijo. Él al tocar el brazo de su madre, recibe la descarga, cae, se desmaya por un momento y empezó con convulsiones y los padres no entendían nada porque nunca les había pasado algo así”, remarcó Julia.

Por lo cual, al llegar antes que la ambulancia al domicilio con su auto particular señaló que “Ese trayecto lo hice con mi hija, mi yerno y el bebé que lloraba. Yo desesperada no sabía qué hacer, mi nieto tenía los labios morados y los ojos blancos que se le iban para atrás. Opto por poner balizas y me fui por la costanera, tocando bocina para que me dejaran pasar, así podía circular y llegar al hospital rápidamente”.

Después, la mujer enfatizó en la atención recibida en el Hospital “Al llegar, lo pusieron en observaciones, lo empezaron a ver y le hicieron un montón de preguntas. Después la atendieron a mi hija que estaba muy nerviosa”.

Finalmente, habló sobre el estado actual de su hija y nieto “Ellos hoy están bien, el bebé no tiene secuelas. También fue importante que, en ese entonces él se encontraba calzado porque suele andar descalzo. Están bien los dos, fue un susto grande, estuvo un solo día en observaciones, lo dejaron en terapia el que ocurrió todo y a las horas, él se levantó como si nada le hubiera pasado y al otro día ya le dieron el alta”.