El Municipio de Río Grande, a través de la Casa de Jóvenes, impulsa un grupo de escucha y acompañamiento destinado a pacientes oncológicos. La propuesta es coordinada por la Licenciada en Psicología, Victoria Kupp, y busca brindar un espacio de contención, apoyo y reflexión para quienes están transitando o han superado un diagnóstico de cáncer.

“El grupo busca acompañar en un momento que suele ser muy complejo”, explicó Kupp en Aire Libre Fm. “Trabajamos sobre las emociones, el impacto del diagnóstico y la posibilidad de ordenar la experiencia que los pacientes van viviendo. Lo principal es ofrecer un espacio donde puedan hablar de lo que sienten y sentirse comprendidos”.

En los encuentros, los temas son diversos: desde el miedo y la incertidumbre hasta los cambios que implica retomar la rutina. “A veces las personas del entorno, con la mejor intención, repiten frases de aliento, pero el paciente necesita algo más: necesita ser escuchado. Escuchar sus miedos, sus angustias, es parte del acompañamiento”, sostuvo la profesional.

Como parte del trabajo grupal, recientemente elaboraron un cuadernillo con consejos para quienes comienzan tratamientos de quimioterapia, una iniciativa impulsada por las propias participantes. “No son consejos médicos aclaró Kupp, sino experiencias y sugerencias que a ellas les hubiese gustado conocer antes de iniciar el tratamiento. Es una forma de acompañar desde lo vivido”.

La psicóloga remarcó además la importancia de despatologizar la vivencia del cáncer: “Tener una enfermedad oncológica no implica tener un trastorno mental. Es una etapa difícil, de crisis y cambios, que requiere acompañamiento, pero no necesariamente una patología. El grupo justamente busca ofrecer ese sostén emocional”.

Los encuentros se desarrollan los martes, de 16:15 a 17:45, en Casa de Jóvenes, y para incorporarse se requiere una entrevista de admisión previa. Quienes deseen sumarse pueden comunicarse al 02964 1562 4832 o acercarse directamente al espacio municipal.

“Este grupo permite que cada persona pueda poner en palabras lo que siente y compartirlo con otros que están atravesando situaciones similares. Entre ellos se genera una red de empatía, escucha y apoyo que tiene un enorme valor humano”, concluyó la licenciada Kupp.