En el marco de los reclamos por la pérdida de días de clase en diversas instituciones educativas, una madre visibilizó este lunes una situación muchas veces ignorada: la falta de respuesta del sistema educativo hacia los alumnos con discapacidad.

Durante la manifestación frente al Ministerio de Educación, la mujer relató a Minuto Fueguino el caso de su hija, una niña con autismo que actualmente asiste al cuarto grado de la Escuela Nº 32. Señaló que la menor enfrenta graves obstáculos para sostener su jornada escolar debido a la falta de personal docente y acompañamiento pedagógico adecuado.

“La situación es insostenible. Mi hija no completa la jornada porque no hay quién la cuide. Está en cuarto grado y tiene contenidos de primero. No aprende a leer ni a hacer multiplicaciones, copia dibujos y hace puntitos de colores”, explicó con angustia.

La madre denunció que las interrupciones en el dictado de clases, los paros y las desobligaciones afectan especialmente a los niños con discapacidad, quienes no pueden recuperar contenidos con la misma facilidad. “Mientras los demás tal vez logran compensar, los chicos con alguna condición particular como el autismo retroceden. Eso no se recupera”, señaló.

Además, remarcó la ausencia de alternativas accesibles para las familias: “Estamos a la deriva. No todos podemos pagar una escuela privada y, aun así, están en la misma situación. No hay recursos, no hay acompañamiento. Nuestros hijos pierden el deseo de ir al colegio porque no hay continuidad ni contención”.

El reclamo se suma a la creciente preocupación de padres de distintas escuelas que denuncian la pérdida de semanas enteras de clases y la falta de respuestas por parte del Ministerio. En este contexto, la madre apuntó a la necesidad urgente de implementar políticas reales de inclusión: “Los chicos con discapacidad también tienen derecho a educarse. Yo quiero que mi hija tenga un futuro, que sea independiente, que pueda trabajar. Pero así, no se puede”.