Luego del incidente que causó fuerte preocupación en la comunidad educativa del Colegio Provincial de Educación Técnica (CPET), donde dos estudiantes publicaron en redes sociales amenazas que hacían referencia a posibles hechos de violencia dentro del establecimiento, se puso en marcha una serie de acciones articuladas entre el colegio y el Ministerio de Educación de la Provincia para abordar integralmente la problemática.

El director del CPET, Oscar Plaza, confirmó que el episodio generó conmoción tanto en las autoridades como en las familias y los propios alumnos. Según detalló, la publicación consistía en un mensaje con referencias explícitas a disparos y a dañar a otros estudiantes, lo cual motivó la inmediata intervención del equipo directivo y la realización de una denuncia formal ante las autoridades judiciales.

Tras la intervención de la Justicia y la participación del área de Delitos Complejos de la Policía Provincial, se decidió avanzar con un plan de trabajo que contempla el desarrollo de jornadas de formación y reflexión dentro de la escuela. Estas jornadas comenzaron la semana pasada y continuarán en las próximas, con dos líneas de acción: una orientada a los estudiantes, con talleres sobre ciudadanía digital, uso responsable de redes sociales y prevención de delitos virtuales; y otra destinada a las familias, que recibirán herramientas para acompañar la crianza en entornos digitales y promover el diálogo intergeneracional.

“Los estudiantes, en general, recibieron bien estas charlas. Pero quienes tomaron real dimensión de la gravedad fueron principalmente los adultos: docentes y padres. Para muchos de los chicos, al principio, esto fue interpretado como un chiste de pésimo gusto”, señaló Plaza. Sin embargo, indicó que uno de los alumnos involucrados logró tomar conciencia del impacto de sus acciones tras ver la reacción de su entorno, el malestar de los padres y el movimiento institucional y policial que generó el caso.

En cuanto a los estudiantes responsables de la publicación, el director explicó que fueron apartados temporalmente del colegio como medida preventiva, en resguardo tanto de ellos como del resto de la comunidad escolar. “Fue una decisión tomada en conjunto con la Justicia. La jueza María Montero dispuso que permanezcan unos días fuera del establecimiento, para dar lugar a la reflexión con sus familias y garantizar la seguridad emocional de toda la comunidad. Durante ese tiempo, se mantuvo el vínculo pedagógico y se les garantizó el acceso al contenido escolar, en resguardo del derecho a la educación”, precisó.

Por otro lado, Plaza relató que el equipo de Delitos Complejos ya venía trabajando con la institución por otras situaciones vinculadas al uso de redes sociales, y que el incidente de las amenazas coincidió con una visita programada. Ante los hechos, las capacitaciones se intensificaron: “La semana pasada vinieron tres veces en un mismo día, con charlas específicas para estudiantes de primero a tercer año y luego para los cursos de cuarto y quinto. Nos explicaron los peligros de exponer datos personales y familiares en redes, muchas veces sin siquiera darse cuenta. Esto es algo que todos debemos entender: los chicos no solo se exponen ellos, sino también a sus familias”, subrayó.

Las actividades continuarán en las próximas semanas con nuevas propuestas lúdicas y preventivas, coordinadas con equipos técnicos del Ministerio de Educación. Se prevé también la convocatoria a nuevos encuentros con las familias, con el objetivo de fortalecer los lazos entre el hogar y la escuela.

Finalmente, el director del CPET remarcó la importancia de que esta situación sirva como un llamado de atención para toda la comunidad educativa. “Hoy más que nunca, debemos estar atentos. Lo que pasó nos podría haber pasado a cualquiera. No se trata solo de sancionar, sino de educar y generar conciencia. Hay muchos riesgos reales en internet y redes sociales, y los adolescentes no siempre dimensionan sus actos. Como adultos, tenemos la responsabilidad de acompañarlos”, concluyó.