En Argentina, la cuota alimentaria es un derecho esencial de niñas, niños y adolescentes, establecido por ley en el Código Civil y Comercial de la Nación, con el objetivo de garantizar el acceso a alimentación, vivienda, educación, salud y actividades recreativas necesarias para su desarrollo integral.
El incumplimiento de esta obligación es una problemática frecuente que deriva en numerosos conflictos judiciales. La normativa vigente establece criterios claros para fijar el monto de la cuota y prevé herramientas legales para obligar al progenitor incumplidor a cumplir, priorizando siempre el interés superior del menor.
Qué es la cuota alimentaria y quién debe pagarla
La ley dispone que ambos progenitores deben aportar económicamente al cuidado y manutención de sus hijos cuando estos no pueden sostenerse por sí mismos. Esta obligación se mantiene aun cuando los padres estén separados, divorciados o no convivan.La cuota alimentaria incluye gastos de alimentación, vivienda, vestimenta, transporte, educación, atención médica y actividades de esparcimiento, es decir, todo lo indispensable para el bienestar del menor. El progenitor que no convive con los hijos debe contribuir de acuerdo con su capacidad económica y el nivel de vida previo a la separación.
Cómo se calcula la cuota alimentaria en 2026
En términos generales, los tribunales fijan la cuota como un porcentaje del ingreso neto del progenitor obligado, que suele ubicarse entre el 20% y el 30% por hijo, sin un tope máximo establecido por ley.Para determinar el monto, los jueces tienen en cuenta:
- Las necesidades del menor, incluyendo educación y actividades extracurriculares.
- Los ingresos del progenitor obligado, ya sean salarios, facturación o trabajo independiente.
- La capacidad económica del progenitor conviviente.
- El nivel de vida previo a la separación.
- La cantidad de hijos y la distribución proporcional de los aportes.
- El régimen de cuidado y tiempo compartido, que puede incidir en ajustes del monto.
Qué sucede si el progenitor no tiene trabajo registrado
La obligación alimentaria no desaparece aunque el progenitor no tenga empleo formal. En estos casos, la Justicia puede:
- Calcular la cuota en base al Salario Mínimo, Vital y Móvil.
- Autorizar pagos en especie, como cubrir escuela, obra social o actividades, siempre complementados con dinero.
- En situaciones excepcionales, extender la responsabilidad a los abuelos, si cuentan con capacidad económica.
Qué hacer si no se paga la cuota alimentaria
La normativa argentina establece que ambos padres deben sostener económicamente a sus hijos hasta los 21 años, o hasta los 25 si continúan estudiando. Ante el incumplimiento, existen varias vías legales:
- Solicitar una mediación.
- Iniciar un juicio por cuota alimentaria.
- Presentar un reclamo por incumplimiento, si ya existe un acuerdo homologado.
Por ello, especialistas recomiendan formalizar siempre los acuerdos y recurrir a asesoramiento legal para garantizar el efectivo cumplimiento de los derechos de niñas, niños y adolescentes.
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