Sara Álvarez es la madre de Juan Ramón Gómez y José Manuel Gómez, dos de los condenados a prisión perpetua por el crimen de Gladys Moledo. Por su parte, el acusado, Gastón Eduardo Blanco, condenado a cumplir la misma sentencia es su yerno y padre del joven de 17 años declarado culpable como participe secundario del crimen.

A pocos días de conocerse la sentencia final por el crimen ocurrido el 9 de septiembre de 2019 en una vivienda de la Margen Sur, la madre de los condenados habló con Minuto Fueguino sobre el difícil momento que se encuentra transitando y pidió perdón a la familia de la víctima, “es lo último que me queda por hacer”, expresó.

“A Gladys la mataron y a mí me mataron en vida, es un dolor muy grande el que siento porque prácticamente está la mayoría de mi familia involucrada en ese crimen.  Anímicamente y moralmente estoy destruida, a mí no me va alcanzar la vida para verlos en libertad, pero tienen que pagar”, dijo Sara quien actualmente se encuentra viviendo en la provincia de Corrientes.  

Recordemos que el juez a cargo de la causa, el Dr. Cesari Hernández, demostró que la hijastra de Moledo, Oriana Milagros González, había dado a luz a una criatura pocos meses antes del crimen, y se la había entregado a la familia de Gastón Eduardo Blanco, quien es yerno de Sara, acusado como coautor de este hecho.

Sobre este último, la mujer confesó, “Por mis hijos más me duele, no por él, porque si él fue capaz de llevarlos ahí a mis hijos, la culpa de todo esto es de él”.

Sobre las posibilidades de hablar con la familia de Gladys dijo, “siento tanta vergüenza, tanto dolor, que yo decidí hablar con los medios para pedirles disculpas a la familia, ya que no tuvieron el valor ellos de pedirles perdón. Y perdón a toda la sociedad porque la mayoría de la gente a mí me conoce, yo viví 17 años en Tierra del Fuego, siento tanta impotencia y tanto dolor que no se dan una idea”.

Una de las hipótesis de este hecho rondaba en que Moledo reclamaba por su nieto entregado a esta familia sin los procedimientos legales, y que la mataron porque amenazó con revelar a las autoridades lo que había ocurrido con el menor.

“Gladys no se merecía una cosa así, a la señora la conocí, sé que era una buena persona. Lamentablemente la hijastra que crió no supo valorar la mamá que tenía, no la conozco mucho pero el poquito tiempo que la vi, no es una buena persona esa chica porque hay una cosa que yo vi una vez en la casa de mi hija, ella le robó un teléfono a la señora y decía burlándose “mira lo que le robe a mi mamá”, yo la mire y le dije eso no se hace, y lo que hizo tampoco, regalar a su hija como un perrito, no tiene perdón de Dios esa piba y mis hijos tampoco”, expresó.

“Tengo nueve hijos en total la mayoría vive allá, pero la sociedad no juzga a los responsables, juzgan a toda la familia, pero la culpable, la promotora de todo esto es Oriana que regaló a su hija, ¿por qué no la dejo con su abuela que tenía derecho?, cuestionó. “Ella tiene que estar en la cárcel, así como están mis hijos, todos los involucrados tienen que estarlo”.

“Vuelvo a pedir disculpas a las hermanas de Gladys, al marido, a la nieta y nietito que quedaron sin su abuela es lo único que me queda por hacer, así lo siento. Iba a hacerlo en un primer momento, pero como toda mamá estaba esperando esperanzada con que mis hijos fueron inocentes”, concluyó.