\"Ya es complicado tener un Juez subrogante a 200 kilómetros, imagínese a más de 1.500\", dijo el Fiscal Federal de la ciudad. En Río Grande, hoy imparte justicia un Juez de Esquel.

Hace una semana, el primer procedimiento bajo la nueva Ley de Flagrancia expuso la acefalía reinante en el Juzgado Federal de Río Grande, cuando un Juez de Esquel debió decidir sobre la suerte de dos sujetos (finalmente fueron liberados), detenidos in fraganti cuando vendían droga en Chacra XIII.

Es que en agosto pasado se jubiló la jueza de Río Grande, Lilian Herráez y a partir de ese momento comenzó a subrogar Federico Calvete, de Ushuaia. A raíz de diversas licencias, este tampoco está en la provincia, por lo que hoy no hay Juez Federal en Tierra del Fuego.

Esta situación fue denunciada y expuesta hoy por el fiscal federal de Río Grande, Dr. Marcelo Rapoport, quien en diálogo con Radio Fueguina sostuvo que “ya es complicado tener un juez subrogante a 200 kilómetros, imagínese tomar decisiones a 1500 kilómetros”, en referencia a Guido Otranto, el juez federal de Esquel.

A su vez, Rapoport indicó que es importante no olvidar que “los jueces no sólo resuelven casos penales, sino que también se expresan, por ejemplo en cuanto a amparos por salud”.

A pesar de la premura que uno podría suponer se necesita para resolver una situación de este tipo, restan meses para que la solución en Tierra del Fuego llegue a buen puerto.

Según explicó Rapoport a Radio Fueguina, “todavía no se ha llamado a concurso” para suplir el cargo, cosa que debe realizar el Consejo de la Magistratura.

Por último, el Fiscal Federal de Río Grande se mostró optimista ante lo que pueda ocurrir una vez se “reactive” el sistema judicial, en febrero y tras la feria judicial, aunque también pidió que los diputados y senadores sean los encargados de trasladar esta injusta situación al Consejo de la Magistratura.