
Grasso detalló los alcances y el sentido de la medida, que “se focaliza en bienes mayormente no producidos en el país y mejora transversalmente la competitividad de la economía y el desarrollo de las inversiones”.
Por su parte, Caballero y los representantes de AFARTE expresaron su “preocupación respecto a determinados productos alcanzados que están vinculados a algunos procesos productivos realizados específicamente en la Provincia”.
En este sentido, Grasso expresó que “dialogamos sobre el impacto de estos casos específicos en la estructura de costos de los procesos productivos realizados en la Provincia, a fin de revisar de manera inmediata las que resultan más críticas, que serían unas 4 posiciones arancelarias, e incorporar a la normativa las modificaciones pertinentes”.
Asimismo, el funcionario reiteró que “el objetivo es mejorar el acceso a componentes de electrónica y tecnológicos que mejoran la competitividad de la economía en forma sistémica y de manera compatible con el normal desarrollo de las actividades de la industria fueguina”.
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