El Gobierno Nacional reaccionó con molestia tras la votación en Diputados que dejó sin efecto el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario. En su habitual conferencia de prensa, el vocero presidencial Manuel Adorni advirtió sobre el costo que implica esta norma y lanzó fuertes críticas a los parlamentarios.
Comparaciones y advertencias
Adorni señaló que el gasto previsto equivale a cuatro meses completos de dietas de diputados y senadores, por lo que ironizó al proponer que los propios legisladores resignen sus sueldos para sostener a las universidades. Según dijo, esa sería una forma de mostrar coherencia frente a lo que aprobaron: “Habría que ver si están dispuestos a hacerlo”.El vocero también planteó un escenario alternativo con mayor carga tributaria: subir el IVA del 21 al 24% durante 45 días. En tono desafiante, preguntó cómo se le explicaría a la sociedad que la decisión de los legisladores se financia con un aumento de impuestos.
Escenarios de recorte
Para dimensionar el impacto fiscal de la ley, Adorni presentó una serie de comparaciones. Afirmó que el presupuesto requerido equivale a:
- suspender todos los planes sociales por tres meses,
- cancelar los subsidios energéticos durante cuatro meses,
- eliminar el presupuesto total del Poder Judicial por cinco años,
- o quitar los subsidios al transporte por un año y medio.
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