La eliminación de aranceles a productos electrónicos importados, prevista para entrar en vigencia el 15 de enero, genera inquietud en el entramado industrial de Tierra del Fuego. En ese contexto, la secretaria de Industria de la provincia, Alejandra Man, analizó el escenario que se abre para la producción local y advirtió sobre las dificultades que podrían profundizarse en el corto y mediano plazo.
“Estamos frente a un panorama complejo, con un alto nivel de incertidumbre respecto del impacto en la producción de 2026”, señaló la funcionaria, al referirse a las consecuencias que podría traer la medida adoptada por el Gobierno nacional.
Man explicó que, ante este escenario, el Ejecutivo provincial viene impulsando instancias de diálogo con los distintos actores del sector. “La provincia viene llevando adelante mesas de diálogo junto a representantes de los trabajadores, cámaras industriales y empresas, con el objetivo de identificar herramientas que permitan mejorar la competitividad frente a la baja de precios en los productos celulares”, afirmó.
En relación con los cambios normativos vinculados a la producción de celulares, indicó que el nuevo esquema representa una oportunidad para sostener la actividad frente a la competencia externa, aunque aclaró que su implementación aún es incipiente. “Aún son pocos los trámites iniciados para nuevos productos bajo esta resolución. Entendemos que las empresas se encuentran cerrando acuerdos comerciales con las marcas y evaluando la factibilidad de producir en Tierra del Fuego”, detalló.
La secretaria también hizo hincapié en la preocupación compartida con trabajadores y empresarios, ante el riesgo que implica la apertura de importaciones. “Comprendemos la preocupación del sector trabajador e industrial, ya que la definición del Gobierno nacional podría derivar en la pérdida de más puestos laborales en nuestra provincia. Desde el Ejecutivo provincial mantenemos el compromiso de generar propuestas que contribuyan a revertir esta situación”, expresó.
Al realizar un balance del año, Man reconoció que el contexto fue especialmente difícil para la industria fueguina. “La retracción del consumo a nivel nacional impactó de manera directa; además, atravesamos modificaciones en los procesos productivos de televisores y celulares, y un cambio en las condiciones de competitividad frente a un escenario de apertura de importaciones que afectó tanto al sector electrónico como al textil”, evaluó.
No obstante, destacó el trabajo que se viene desarrollando desde la Secretaría de Industria para acompañar al sector, agilizando gestiones y promoviendo nuevas alternativas productivas. En ese sentido, mencionó los avances en la modificación de la Resolución CAAE 47/25, orientada a impulsar nuevos sectores con perfil exportador y diversificar la matriz productiva provincial.
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