Generadores de una granja cripto alteran la vida en el barrio San Martín: vecinos exigen controles y respuestas

En el barrio San Martín crece la preocupación y el fastidio de los vecinos por el funcionamiento ininterrumpido de cuatro generadores eléctricos a combustible que alimentan una granja de criptomonedas instalada en el sector. Estos equipos de gran tamaño, ubicados dentro del predio de una fábrica, operan sin pausa las 24 horas, generando un ruido constante que se ha vuelto insoportable para los residentes.

El zumbido persistente no solo complica el descanso durante la noche, sino que también interfiere en las actividades cotidianas dentro del hogar. Estudiar, trabajar de manera remota o simplemente mantener una charla tranquila en familia se ha convertido en un desafío. “Es como si un camión estuviera estacionado con el motor encendido permanentemente a un metro de tu puerta”, describió con indignación una vecina cuya casa se encuentra a pocos pasos del lugar.

A la molestia sonora se suma el temor por el impacto ambiental que representa la quema continua de combustible, tanto por las emisiones contaminantes como por el efecto acústico prolongado. Ante este panorama, los habitantes del barrio ya han elevado reiteradas notas formales a distintos organismos gubernamentales, aunque, según relatan, todavía no han obtenido ningún tipo de respuesta oficial ni se anunciaron medidas que busquen atenuar la situación.

“Lo que pedimos es muy claro: queremos saber si estos generadores están habilitados, si alguien hizo las mediciones correspondientes de ruido y contaminación. No podemos seguir viviendo así, es insostenible”, expresó otro vecino afectado.

En medio del silencio de las autoridades municipales y provinciales, la comunidad del San Martín asegura que continuará visibilizando el conflicto y no descartan organizar nuevas acciones colectivas para presionar por una solución definitiva.