La familia de Santiago Liquín, el joven de 18 años que perdió la vida en un accidente de tránsito ocurrido en octubre de 2021 en la avenida San Martín de Río Grande, sigue en pie de lucha tras el fallo del Superior Tribunal de Justicia de Tierra del Fuego que absolvió a Germán Sopena, conductor condenado en 2024 por el hecho.

El abogado de la familia, Dr. Francisco Ibarra, dialogó con TVP Noticias y manifestó su profunda disconformidad con la resolución judicial, asegurando que “deja una sensación de injusticia” y que “con el caudal de pruebas existente en el expediente no hay ninguna duda razonable” que justifique la absolución.

El fallo del Superior Tribunal se basó en la existencia de dos versiones sobre cómo se produjo el cruce de la avenida: la declaración del propio Sopena y la de Matías Berger, amigo que acompañaba a Santiago la noche del accidente. Según Ibarra, el tribunal ignoró que las pruebas documentales, periciales y la reconstrucción del hecho confirman la versión de Matías y contradicen la del imputado.

“Matías expresó claramente ante el juez y en la reconstrucción que ellos venían por la vereda ascendente, cruzaron la calle y, al llegar al bulevar, fueron embestidos. Esto está respaldado por la ubicación de las lesiones en el cuerpo de Santiago, especialmente en el lado izquierdo de la cabeza. Esa disposición no es compatible con la hipótesis de Sopena, que asegura que los jóvenes saltaron desde el cantero hacia la calzada”, explicó el letrado.

Para Ibarra, el Superior Tribunal realizó un “análisis sesgado” del expediente, tomando solo parte de la información y dejando de lado elementos clave. “No se puede sostener una duda razonable cuando las pericias médicas, científicas y testimoniales son contundentes. La declaración inicial de Matías ante la policía se hizo en estado de shock, sin abogado y minutos después de perder a su amigo, pero en sede judicial fue precisa y coherente, y eso es lo que debía valorarse”, afirmó.

El fallo también hace referencia a un supuesto “riesgo concurrente” en relación al accionar de los jóvenes, algo que Ibarra rechaza de plano. “No puede haber equivalencia entre dos chicos que están terminando de cruzar una calle y un conductor que circula en exceso de velocidad, con alcohol en sangre y por el carril izquierdo. Desde lo jurídico, es imposible equiparar esas responsabilidades”, subrayó.

El abogado también cuestionó la forma en que se notificó la resolución. “El fallo tiene fecha 4 de agosto y recién hoy se notificó a las partes. La familia se enteró por los medios de comunicación y no por la justicia, lo que me parece sumamente desprolijo y genera más dolor. Incluso yo mismo me enteré a través de la prensa antes de recibir la notificación oficial”, señaló.

La decisión judicial, tomada por mayoría de tres votos contra uno, dejó sin efecto la pena de tres años de prisión en suspenso y la inhabilitación de cinco años para conducir que Sopena había recibido en 2024 por “homicidio culposo en concurso ideal con lesiones graves culposas”.

Ibarra confirmó que el próximo paso será presentar un recurso extraordinario federal ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, alegando la “arbitrariedad en la sentencia” y la valoración parcial de las pruebas. “La idea es seguir buscando justicia. Con este fallo, lejos estamos de alcanzarla”, sostuvo.

Mientras tanto, la familia de Santiago volvió a reunirse en el monumento que lo recuerda para manifestar su dolor y rechazo a la absolución. Allí, la madre, la hermana y el padre ratificaron que no bajarán los brazos y que mantendrán viva la memoria de Santiago hasta que el responsable enfrente las consecuencias judiciales.