
Silvia Ocampo, madre de la joven acusada por la familia de la víctima de un incendio fatal ocurrido días atrás en Río Grande, dialogó con Minuto Fueguino y dio su versión de los hechos. La mujer también es una de las damnificadas por el siniestro, que afectó gravemente su vivienda.
“El incendio se desató a las siete de la mañana. Nosotros escuchamos el grito del muchacho que estaba ahí. Me levanté y sentí olor a humo. Le dije a mi marido: ‘levantate rápido porque no sé qué está pasando ahí’. Ya en ese momento la casa de mi hija estaba consumida por las llamas”, relató Silvia.
Las pérdidas materiales fueron significativas: “Sí, muy grandes. Casi agarró todo en mi casa”, lamentó.
Según detalló, durante la madrugada un hombre se habría presentado en la casa de su hija de forma agresiva: “Sí, se presentó. Nosotros llamamos a la policía, mi hija también llamó porque tenía miedo. Eso fue a las dos y cuarenta y cinco de la noche”.
Consultada sobre si sabían que había una persona dentro de la vivienda al momento del incendio, aseguró: “No sabíamos prácticamente nada. Nada. Solo que yo escuché que él... como que serruchaba la pared o el techo, no sé”. Y agregó: “Yo vi que uno se retiró, el flaquito, en alto. Para mí que el otro quedó adentro, porque vi que salió solo uno”.
Horas después, y ya con las llamas avanzando, Silvia logró avisarle a su hija: “Le avisé rápido. No me podía comunicar, no sé si tenía el celular apagado o estaba durmiendo”.
Frente a las acusaciones de la familia del fallecido, fue contundente: “No, no, están muy equivocados. Ella no estaba en la casa. La están acusando de algo que no es. Nada que ver. Yo sé bien que ella no estaba acá”.
Sobre la relación entre su hija y el fallecido, aclaró: “No sé, la verdad no sé, porque yo no la investigo a ella. Y nunca lo vi a él acá. Nos enteramos quién era cuando salió la noticia. Mi marido lo conocía porque trabajaban juntos”.
El dolor por las pérdidas materiales se suma a la angustia por las acusaciones: “Nos sentimos mal porque la familia de él nos está acusando a nosotros. Y nada que ver. Nada”.
Actualmente, Silvia y su familia están alojados provisoriamente en la casa de su hijo: “Sí, en la casa de mi hijo, pero es chiquita. Somos tres: mi hijo, mi esposo y yo. Estamos viendo si conseguimos otro lugar”. También indicó que han recibido asistencia inicial de Desarrollo Social y que siguen necesitando ayuda: “Necesitamos materiales para construir la casa otra vez. También ropa y zapatillas”.
Quienes deseen colaborar pueden acercarse a la casa de su hijo, ya que en su domicilio actual no pueden recibir visitas ni donaciones.
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