
La Asociación Taxistas Unidos de Río Grande (ATURG), encabezada por Griselda Fuentes, volvió a poner en agenda la necesidad de que el Concejo Deliberante abra un espacio de debate público sobre el transporte en la ciudad. Para ello, la entidad presentó un petitorio solicitando una audiencia que permita discutir la creación de un marco legal unificado e igualitario para todos los prestadores del servicio.
El reclamo surge a partir de la presencia de plataformas digitales, como Uber, que operan sin una normativa específica. Según explican desde la asociación, esta situación los coloca en una posición de desventaja, ya que los taxistas deben afrontar requisitos fiscales, técnicos y administrativos que incrementan los costos, mientras que los conductores de aplicaciones no están sometidos a las mismas obligaciones.
El abogado de la entidad, Cristian Gabriel Rubio, expresó que se trata de una “competencia desleal que perjudica directamente a los trabajadores del sector”. En ese sentido, recordó que la evolución del transporte siempre estuvo acompañada por regulaciones: “Así ocurrió cuando aparecieron los remises con el teléfono o los taxis con la llegada del automóvil; el derecho debe acompañar los cambios sociales”, señaló.
Propuestas en discusión
La ATURG elaboró un listado de condiciones mínimas que deberían cumplir todos los vehículos dedicados al transporte de pasajeros, independientemente del sistema en el que operen. Entre las exigencias vinculadas a salubridad, se plantea la obligatoriedad de contar con tapizados lavables y un certificado mensual de desinfección.En cuanto a la seguridad, los puntos son más amplios:
- Vehículos sedán de 4 puertas, con hasta 7 años de antigüedad y una cilindrada mínima de 1300 cc.
- Seguro vigente para terceros y pasajeros.
- Revisión Técnica Obligatoria cada seis meses.
- Cubiertas adecuadas para el invierno.
- Identificación visible del conductor y del vehículo mediante código QR.
- Botiquín de primeros auxilios, balizas y matafuegos a bordo.
- Licencia profesional clase D1.
- Prohibición del uso de vidrios polarizados.
Finalmente, la ATURG subrayó que la discusión debe realizarse en el ámbito institucional y no en las calles. Por eso, insistió en que el Concejo Deliberante habilite la audiencia pública como espacio de diálogo en el que participen todas las partes involucradas.
Compartinos tu opinión