El incremento de casos de sífilis en Tierra del Fuego encendió nuevas alarmas entre los profesionales de la salud. Según datos oficiales, la provincia atraviesa uno de los aumentos más pronunciados del país y la situación, de acuerdo con especialistas, no tiene precedentes.

El infectólogo Edgar Vega, entrevistado por TVP Noticias, describió el panorama con preocupación: “Es una situación nunca vista, los casos de sífilis son récord en Argentina y en el mundo, récord histórico, nunca hubo estos casos de sífilis como hay hoy”. El profesional explicó que el crecimiento registrado en la provincia resulta más notorio debido a su población relativamente baja, lo que amplifica las tasas de incidencia.

Las estadísticas actuales muestran un escenario complejo: Río Grande registra 170 casos, Ushuaia 162 y Tolhuin 7, alcanzando un total provincial de 339 diagnósticos, cifra que equivale a 189 casos cada 100 mil habitantes. Vega calificó estos números como “una barbaridad” y advirtió que solo en la última semana se sumaron 3 nuevos casos en Ushuaia y 7 en Tolhuin.

El especialista atribuyó el incremento a múltiples factores. Entre ellos, señaló el abandono progresivo de métodos de protección: “Nosotros nos criamos con el método del preservativo como medio de cuidado, y eso se ha dejado de usar, hay un relajamiento en el uso del preservativo, sobre todo, hay una falta de cultura y educación, de difícil acceso para algunos y fácil para otros”. También añadió que “no hay suficientes insumos para testeo, lo que hace que nosotros lleguemos eventualmente tarde al diagnóstico”.

Vega destacó la importancia de la detección temprana: “Es fundamental el diagnóstico temprano porque con eso nosotros llegamos rápido al tratamiento porque es una enfermedad fácil de tratar, con penicilina se cura y con eso evitaríamos que se siga transmitiendo”. Explicó además que “es una enfermedad de transmisión sexual, se puede dar en relaciones orales, anales o vaginales y también se da la transmisión vertical de madre embarazada al bebé”.

La evolución de la infección —si no es tratada— puede avanzar silenciosamente entre distintas etapas. El profesional detalló que la mayoría de los casos detectados corresponden a sífilis primaria, marcada por “la aparición de una ulcera o llaga por donde la bacteria entra al cuerpo, puede ser la boca o la región genital y se acompaña de un ganglio”. Pero advirtió que, si no se interviene, la infección progresa: “Si se deja que esa sífilis primaria evolucione, al cabo de unos días se va sola, y el paciente cree que se curó, pero no se curó nada”, pudiendo llegar a la etapa secundaria, caracterizada por “lesiones en la piel que son manchas en las palmas de las manos y los pies que son muy contagiosas y ganglios generalizados”. Y alertó que en las formas tardías “una sífilis terciaria puede dar manifestaciones cardiovasculares, a nivel neurológico y del sistema óseo que ya son inevitables”.

Consultado sobre la frecuencia adecuada de controles, Vega fue claro: “Cada cuanto depende de cada uno, uno sabe por donde anduvo, si vos tenes parejas múltiples y una situación inestable a nivel sexual, no te cuidas con preservativo, tenés una conducta de riesgo y tenés que hacer más habitualmente el test”.

Para el médico, el panorama actual exige medidas urgentes: “Si seguimos con estos números vamos a llegar a fin de año con un caso por día o quizás más”, advirtió. Y volvió a enfatizar un mensaje clave: “Debemos volver al uso del preservativo, usarlo correctamente y fijarnos con quien andamos”.