En el marco de las movilizaciones contra el proyecto de reforma laboral impulsado por el Gobierno nacional, el secretario general de ASIMRA, Javier Escobar, cuestionó con dureza la ausencia del triunvirato de la CGT de la Región Río Grande y reclamó su renuncia para avanzar en una reorganización de la central obrera a nivel local.

Escobar sostuvo que la falta de presencia de la conducción regional no tuvo explicaciones públicas y remarcó que “es una pregunta que la tienen que responder ellos”. Desde ASIMRA, afirmó, consideran que la actual conducción “ya dio todo lo que podía dar” y que la situación “les quedó grande”.

En ese sentido, adelantó que el gremio pedirá formalmente que el triunvirato dé un paso al costado. “ASIMRA se lo va a pedir en algún plenario, si es que se convoca alguno, porque prácticamente no se convocan nunca. Es un pedido explícito de los secretarios y delegados regionales de Río Grande”, señaló.

Escobar explicó que, ante la falta de conducción, los gremios debieron organizarse de manera independiente para poder manifestarse y acompañar el plan de lucha definido por la CGT nacional. “Nos terminamos organizando entre los gremios para salir a la calle y dar esta pelea”, indicó.

El dirigente también fue crítico respecto al rol que debería asumir la CGT frente al Gobierno nacional. A su entender, tanto la conducción nacional como las regionales “no deberían sentarse en ningún momento a negociar derechos laborales”. Y agregó: “Si avanzan sobre los derechos, la respuesta tiene que ser paro, paro y paro. Se está analizando un paro nacional y, para mí, debería ser de 48 horas”.

Finalmente, Escobar advirtió sobre las consecuencias sociales del proyecto oficial. “Si no defendemos los derechos laborales, estamos entregando soberanía y el futuro de nuestros hijos. Ya atacaron a los jubilados desde el día uno y ahora van por los trabajadores, tanto formales como informales”, concluyó.