
El próximo 20 de junio, en el marco de la Fiesta Nacional de la Noche Más Larga, un grupo de nadadores y nadadoras se volverá a zambullir en las gélidas aguas del Canal Beagle. La particularidad de este año es que la actividad dejará de ser una simple “chapuzón simbólico” para transformarse en una verdadera prueba de resistencia: los participantes recorrerán mil metros por la mañana y otros 500 por la noche.
Así lo confirmó César, uno de los referentes de la disciplina en Ushuaia, integrante de la asociación civil Beagle Team, quien explicó que esta edición será distinta a las anteriores. “Este año metimos distancia, así que las personas que van a venir vienen pura y exclusivamente a nadar”, sostuvo en Radio Provincia .Y detalló: “Van a nadar mil metros a las 11 de la mañana y a la noche otros 500 metros. No va a ser mar adentro, pero sí canal adentro, dentro del Beagle”.
La actividad, que se realiza de forma no competitiva, reunirá a nadadores y nadadoras de distintas partes del país y del extranjero. “Viene gente de Neuquén, de Cutral Co, del sur de Chile, y también un par de Buenos Aires”, contó César. “Acá la competencia es sobrevivir”, dijo entre risas, para remarcar el carácter participativo del evento.
Las aguas del canal, cuya temperatura puede descender a los 5 grados o menos, exigen preparación, técnica y mucha responsabilidad. “No es a lo macho, no es tirarse y bancársela”, aclaró el referente. “Hay una técnica, una preparación, y más allá de lo físico, lo más importante es lo mental. Un chileno que vino a hacer un cruce dijo que se preparó tanto físicamente, pero que se dio cuenta de que era más mental que otra cosa. Y es verdad”.
César forma parte del grupo Beagle Team, que reúne a personas que practican natación en aguas frías y también stand up paddle. “Nos encargamos de recibir nadadores, de coordinar cruces entre Chile y Argentina, y de garantizar logística y seguridad”, explicó. Y señaló que también existe en Ushuaia la agrupación NAF (Nadadores de Aguas Frías), además de otros grupos y personas que se han ido sumando a esta disciplina en auge.
Sobre la seguridad, aseguró que todo está cubierto: “La prefectura ya lo tiene avalado. El lugar donde vamos a nadar está cerca de un centro médico, tenemos rescatistas, guardavidas, motos de agua y una zona con bollado para garantizar que no sea profundo”.
El proceso para iniciarse en este tipo de actividad no es sencillo, pero tampoco imposible. “Es muy personal. Lo primero es tener un control médico y después es paulatino. Nos pueden buscar en las redes como Beagle Team, donde compartimos información sobre cómo empezar”, dijo César, quien lleva ya ocho años practicando la disciplina. “Sin querer, sin querer… porque yo dije que no grababa más, que no hablaba más, y me cambió la vida para bien”, confesó.
Finalmente, describió la importancia del acompañamiento durante y después de la inmersión: “Vos salís literalmente congelado. No te podés ni poner una media, y ahí está el que te alcanza un poncho, una infusión tibia. Esa parte también es clave”.
Las dos inmersiones están previstas como parte del programa oficial de la Fiesta Nacional de la Noche Más Larga. Con transmisión vía streaming incluida, se trata de un evento que mezcla deporte, resiliencia, y una conexión única con el entorno natural más austral del país.
“Nos une el agua”, sintetizó César. Y ese vínculo, sin dudas, se hará visible una vez más el 20 de junio en el corazón del Canal Beagle.
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