
La política de tasas altas que aplica el Banco Central para contener la presión cambiaria volvió a repercutir de lleno en el consumo. Con el encarecimiento del financiamiento, las compras en cuotas sin interés prácticamente desaparecieron y, en el mejor de los casos, solo se encuentran opciones en tres pagos para operaciones que superan un monto mínimo.
Tarjetas más caras que nunca
El impacto se observa con mayor crudeza en los planes largos. El esquema de 12 cuotas, que no hace mucho se ofrecía al 92% anual y luego saltó al 99%, ahora trepó al 115% de interés. En la práctica, el Costo Financiero Total (CFT) alcanza hasta el 247% en bancos y supera el 320% en emisoras no bancarias.Desde las compañías emisoras explicaron que el ajuste responde al aumento de los costos de fondeo, encarecidos por la falta de liquidez en el mercado. Esa presión, señalaron, golpea de lleno a la rentabilidad del sector y obliga a trasladar los incrementos a los usuarios.
La visión de los bancos
El encarecimiento del crédito no es un fenómeno exclusivo de las tarjetas. Directivos de entidades financieras advierten que la suba de encajes obligatorios inmovilizó buena parte de los depósitos, dejando menos dinero en circulación.“Quieren secar la plaza de pesos y eso nos limita a la hora de prestar”, reconoció un CEO bancario. Otro ejecutivo fue más allá y marcó las distorsiones que genera el esquema: depósitos que migran hacia cauciones, tasas más elevadas y una presión creciente sobre el sistema.
Cuotas fijas, un riesgo creciente
En este contexto, los planes de financiación a tasa fija dejaron de ser un alivio para convertirse en una carga pesada. Aunque garantizan previsibilidad en el valor de las cuotas, los intereses crecientes encarecen los productos muy por encima del precio inicial, restando atractivo al consumo financiado.
El lado positivo: el regreso del plazo fijo
Mientras las tarjetas pierden terreno, los plazos fijos volvieron a ganar atractivo. Con la inflación de julio en 1,9%, los rendimientos en términos reales mejoraron. Hoy los bancos ofrecen tasas que van del 32% al 54% TNA, según la entidad.En la punta aparecen Banco Tierra del Fuego (54%), Macro (53,5%) y CMF (52%), seguidos por Bica, Voii (51%) y Reba (50%). También sobresalen Meridian y Mariva (49%) junto al Banco de Córdoba (48,5%). En la zona media figuran ICBC (47,7%), Hipotecario (47,5%) y Nación (47%), mientras que en el extremo más bajo se encuentran bancos como Formosa (32%) y Masventas (30%).
En términos mensuales, los rendimientos de las mejores opciones se acercan al 5% por mes, posicionando nuevamente al plazo fijo como una alternativa de resguardo en un escenario económico marcado por la incertidumbre.
Compartinos tu opinión