Luego del conflicto ocurrido el pasado 28 de octubre en el que integrantes de la Iglesia Hijos del Altísimo denunciaron que una familia usurpó parte de su terreno, hoy alrededor de las 8.30 de la mañana, Daniel Condorí decidió encadenarse en las puertas del Juzgado n°2 junto con sus dos hijos, con el fin de reclamar que su señora pueda entrar y salir del lugar.

En diálogo con Minuto Fueguino, tanto Condorí, como familiares y amigos de la familia, aseguran que miembros de la Iglesia se encuentran aún en la puerta de la casa, que “no se quieren retirar y ellos mismos dicen que les pagan para estar ahí”. Conjuntamente, afirman que no pueden hacerles llegar comida, agua o elementos con gas para cocinar o calentarse a la mujer que se encuentra dentro de la casa con su hija de tres años. “Está todo el día con fueguito, carbón, leña, y calienta en una olla”, expresó el marido.

En relación a esto, el Doctor Raúl Sahade, miembro del Juzgado en cuestión, dijo que “no es así, simplemente hay una orden de no innovar […], no pueden seguir construyendo, no pueden ingresar materiales de construcción, pero si agua, comida. No puede ingresar nadie del exterior, pero si pasarles cosas porque es algo lógico”.

Con respecto a la situación de la mujer, en la que Condorí afirma que se encuentra “presa”, ya que no puede salir ni entrar, Sahade expresó que “ella puede salir, lo que no puede hacer es ingresar nuevamente”. Y agregó que al padre de familia “le expliqué la situación […], de que estábamos esperando unos informes de Tierras y de diferentes organismos […]sobre la titularidad del terreno, y en caso de que no estar a nombre de la denunciante que es la Pastora de los Hijos del Altísimo o si llegase a estar a nombre de un tercero y ese tercero no ha hecho la denuncia, rechazaré el requerimiento fiscal y levantaré la consigna”.

Cabe agregar que la Iglesia que se encuentra denunciando usurpación por parte de esta familia, usurpó un terreno en el barrio Perón.