La secretaria de Industria de Tierra del Fuego, Alejandra Man, dialogó con Fm La Isla y analizó la compleja situación que atraviesan los sectores productivos de la provincia, con especial énfasis en la industria textil, una de las más afectadas por la coyuntura nacional.

“Seguimos trabajando junto a las empresas, pero la realidad es que el escenario es de mucha incertidumbre. Hay firmas que operan bajo medidas cautelares y otras que directamente quedaron fuera del régimen, lo que les impide producir y exportar con beneficios fiscales. Eso genera un panorama muy difícil de planificar”, expresó la funcionaria.

Man explicó que el Gobierno provincial mantuvo reuniones con representantes de empresas textiles y con la ministra de Trabajo, Sonia Castiglione, para evaluar alternativas. Sin embargo, reconoció que las decisiones de fondo dependen de Nación. “Son políticas que exceden a la provincia. Nosotros acompañamos y gestionamos, pero los cambios estructurales los define el Gobierno nacional”, señaló.

En relación con la situación de las empresas Australtex y Sueño Fueguino, Man consideró que “cada firma atraviesa un momento distinto”, aunque todas enfrentan las consecuencias de una fuerte caída del consumo y de las dificultades macroeconómicas del país. “Hoy la prioridad de las familias no es comprar indumentaria, y eso se siente a lo largo de toda la cadena de producción. Estamos frente a una recesión económica importante”, sostuvo.

Sobre los anuncios vinculados a la actualización de procesos productivos en la fabricación de celulares y autopartes electrónicas, impulsados por el legislador Cotto, la secretaria aclaró que no se trata de una medida unilateral del Gobierno nacional, sino de un pedido de las cámaras empresarias. “Las empresas presentaron sus proyectos para modernizar los procesos, porque la tecnología avanza y hay que adaptarse. No se busca reemplazar empleo, sino ser más competitivos y abrir nuevos nichos de producción”, explicó.

En ese sentido, destacó que la incorporación de autopartes representa una oportunidad para diversificar la matriz productiva fueguina: “Toda posibilidad de ampliar la producción es positiva. Es un mercado distinto, con otro tipo de demanda y potencial para generar más actividad local”.

Por último, Man se refirió al sistema de ventas directas conocido como Courier, que buscaba facilitar la comercialización de productos electrónicos desde Tierra del Fuego hacia el resto del país. “Fue una buena idea, pero no tuvo el impacto esperado. Hoy el consumo está muy deprimido y la gente no tiene capacidad de compra. Además, los pagos en dólares y la falta de financiamiento hacen difícil que funcione como se pensó”, evaluó.

La funcionaria concluyó señalando que el principal desafío es sostener el empleo y la producción en medio de una coyuntura económica adversa. “La provincia cumple su rol de mediadora y acompañamiento, pero los márgenes son acotados. Lo importante es seguir gestionando, dialogando y defendiendo a los trabajadores y a la industria fueguina, que sigue siendo un motor clave para nuestra economía”.