El secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas Privado de Tierra del Fuego, Luis Sosa, dialogó con Fm La Isla y se pronunció sobre la situación del sector hidrocarburífero en la provincia y la incertidumbre generada por la empresa Roch, que atraviesa dificultades económicas junto a sus socios, y los cambios operativos en YPF.

“Primero quiero llevar tranquilidad a los trabajadores de Roch. La empresa no se va de Tierra del Fuego”, aseguró Sosa. El dirigente precisó que los rumores sobre un supuesto comunicado oficial de la compañía eran falsos y que, según la hija del dueño, “no fue así”.

Según explicó, la firma atraviesa dificultades financieras, pero no existe una decisión formal de retiro. “Uno de los motivos tiene que ver con una situación económica complicada de Roch y de sus socios, CrowPoint y otra firma, pero eso no significa que se vayan de la provincia”, afirmó.

Sosa destacó la preocupación del sindicato ante la posibilidad de que YPF reduzca la dotación de personal en sus yacimientos. “Nos sentamos con el gobernador y con YPF para hablar del futuro laboral de nuestros afiliados. El gobernador no está de acuerdo con esa reducción, pero algunas empresas intentan pagar a los trabajadores para que se vayan. Nosotros les decimos que esa plata se termina rápido y después no hay trabajo”, señaló.

En ese marco, Sosa advirtió que la pandemia cambió la forma de operar la industria. “La industria se acostumbró a trabajar con menos gente durante la pandemia. Hoy los trabajadores miran la situación de otra manera y eso nos complica, porque queremos que el trabajador vaya al campo, se gane la plata con su sudor, y no que cobre sin trabajar”, explicó.

El dirigente también analizó la situación de los trabajadores de Tierra del Fuego ante oportunidades fuera de la provincia: “Ninguna de esas provincias va a absorber mano de obra fueguina. Cada región protege a su propia gente. Neuquén, Mar del Plata, Tierra del Fuego… todos tenemos de todo”, indicó.

Respecto a los cambios estratégicos de YPF, Sosa señaló: “La empresa decidió apuntarle al no convencional, y eso hace que se trasladen a Vaca Muerta. Esto generó lo que se conoció como Plan Andes y las áreas maduras. Esperamos que la nueva operadora que llegue a Río Grande traiga inversión y genere mano de obra para perforación, terminación y todo lo que tenga que ver con la actividad”, sostuvo.

El sindicalista también adelantó la intención del gremio de discutir un convenio colectivo de trabajo local: “Queremos sentarnos con las tres operadoras presentes en la provincia para acordar condiciones específicas para nuestros trabajadores. Respetaremos el convenio nacional de la federación, pero no será la primera provincia que negocie un convenio local”, afirmó.

Sosa concluyó con un llamado a la prudencia y al diálogo: “Todo va a depender de la buena voluntad económica del trabajador en su momento. Nosotros siempre buscamos proteger al trabajador y a su familia. No queremos que arreglen por plata sin tener una garantía de continuidad laboral”, cerró.