La subsecretaria de Discapacidad de la provincia, Cecilia Pereira, brindó un panorama detallado sobre la situación actual del Régimen Único de Pensiones Especiales (RUPE), un beneficio provincial destinado a personas con discapacidad, adultos mayores y otros grupos que encuadran en los ítems establecidos por la Ley N° 389.
“El régimen está avalado bajo cinco ítems dentro de la ley 389. Actualmente tenemos pensiones de vejez, por discapacidad y otras categorías. Yo estoy a cargo de las pensiones por discapacidad”, explicó Pereira en diálogo con Radio Fueguina.
Según informó, en Tierra del Fuego hay 1.982 beneficiarios activos del RUPE. “En Ushuaia tenemos 892 personas activas, en Tolhuin 68 y en Río Grande 1.022”, precisó. De ese total, unas 900 personas cuentan con cobertura de obra social, mientras que el resto posee otros tipos de cobertura o depende de los aportes familiares.
Respecto al monto actual del beneficio, la funcionaria detalló que la pensión asciende a 562.242 pesos mensuales. “Es un monto que se percibe de manera mensual, y las personas deben mantener su documentación actualizada. En el caso del certificado médico oficial, dependiendo del diagnóstico, tiene vencimiento y debe renovarse”, indicó.
Pereira explicó que el trámite para acceder a la pensión se inicia una vez obtenido el certificado único de discapacidad (CUD). Luego, el solicitante debe tramitar el certificado médico oficial, que acredita el porcentaje de incapacidad. “Las personas deben tener una incapacidad permanente del 66% o más y una residencia de al menos cinco años en la provincia. Para los nacidos en Tierra del Fuego, la residencia se acredita con el nacimiento mismo”, explicó.
El proceso administrativo puede extenderse. “El trámite completo demora unos 90 días hábiles, pero la persona puede quedar en lista de espera hasta que se liberen fondos del presupuesto provincial”, señaló. Actualmente, hay 176 personas esperando para ser incorporadas al régimen.
Sobre este punto, la subsecretaria aclaró que la limitación no está vinculada a la voluntad política sino a la disponibilidad presupuestaria. “Nosotros realizamos la defensa del presupuesto y, de acuerdo a lo que se habilite, vamos dando lugar a nuevos ingresos. Hoy el presupuesto provincial permite sostener alrededor de dos mil pensiones activas”, comentó.
Pereira adelantó que en noviembre el área deberá realizar una nueva defensa presupuestaria ante la Legislatura provincial, donde se evaluará una posible ampliación de los fondos destinados al programa. “Nuestra expectativa es poder sostener el orden administrativo alcanzado y, en lo posible, incrementar el número de beneficiarios. Este año ya entregamos 118 nuevas pensiones y estamos bastante más organizados que en años anteriores”, sostuvo.
Consultada sobre la posibilidad de que personas con pensiones nacionales hayan optado por la provincial, confirmó que “sí, algunos beneficiarios de la Nación renunciaron a su pensión nacional para tramitar la provincial, sobre todo en Río Grande”. En esos casos, advirtió que “siempre se les informa que existe un listado de espera, pero aun así muchos deciden hacer el cambio”.
Pereira también remarcó la importancia del seguimiento y control de la documentación, incluso en casos de discapacidad permanente. “No se trata de un control punitivo, sino de un acompañamiento. Lo ideal es mantener un control de que la persona tenga tratamiento, que reciba los medicamentos correspondientes y que se evalúe si su condición evolucionó o mejoró”, afirmó.
En cuanto a los tipos de discapacidad contemplados dentro del régimen, mencionó que “entran muchísimas: visual, motriz, visceral, mental, entre otras”.
Finalmente, la subsecretaria subrayó que el sistema provincial se mantiene “ordenado y activo, sin los problemas que se registran a nivel nacional con las bajas masivas de pensiones”.
“Las titulares de RUPE están tranquilas, no estamos atravesando situaciones como las que se viven con las pensiones nacionales. Nuestro trabajo es acompañarlas, sostener el beneficio y garantizar que se cumpla la ley”, concluyó Pereira.
El Régimen Único de Pensiones Especiales (RUPE) continúa siendo una herramienta clave del Estado fueguino para garantizar una asistencia económica estable a personas con discapacidad o en situación de vulnerabilidad, reafirmando el compromiso provincial con la inclusión y el bienestar ciudadano.
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