Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido

Click aquí para activar las notificaciones y recibir las noticias directamente en su escritorio.

Regionales

Cuando la desidia es sinónimo de desprecio

Cementerio de la Misión Salesiana se encuentra ubicado a la vera de la ruta 3. Cualquier persona que pase por ese lugar podrá ver en el abandono y destrucción en el que se encuentra ese lugar; indescifrable cantidad de tumbas sin nombre y textos con vergonzantes homenajes, se agrega esa lúgubre pintura de la ruina: cruces rotas y esparcidas por el suelo, tumbas sin señalizar, placas y cercos destrozados.

Una tranquera y un alambrado cercar el lugar, en el cual se puede acceder al predio del denominado Cementerio de la Misión Salesiana de Río Grande. Allí, una innumerable cantidad de cadáveres de nativos fueguinos tuvieron su “cristiana sepultura”. Desde una mediana distancia ya se puede apreciar el cerco perimetral semidestruido, como anticipo de la pintura de desidia y ruina que podrá apreciar el visitante.

Las cruces de frágil madera se encuentran esparcidas por el lugar carcomidas por los vientos huracanados, la humedad de la costa marina y la erosión del salitre, sin que se pueda observar alguna iniciativa de preservación del sitio.

En el lugar hay enterradas algunas monjas que alcanzaron el homenaje de tener una tumba de mármol blanco donde figuran estampados sus nombres. El pomposo mármol albino evidencia una notoria degradación.

El resto del espacio asignado al “campo santo” fue dedicado a alojar a los nativos que fallecían por doquier en la reservación salesiana. Sólo puede estimarse la cantidad de “NN” por los restos de las cruces esparcidas entre los pastizales.

El deplorable estado del lugar no impide apreciar algunas singularidades visuales que caprichosamente se erigen ante el visitante. Al elevar la mirada, se puede enlazar la cruz metálica erigida en el cementerio con el telón de fondo del cabo Domingo, sitio donde presuntamente se concretó una matanza. Al girar la vista hacia el oeste, se puede encontrar otra paradójica relación, al superponer esos herrumbrados caños con la imagen de la cruz blanca de reluciente cemento, que se asoma desde la loma que protege los edificios de la misión e identifica al lugar donde se encuentran inhumados los restos de algunos prohombres de la época.

Los pretendidos homenajes del municipio local complementan el patético paisaje. El eufemismo utilizado en el texto de una placa de bronce. “Referencia histórica. En este camposanto descansan en paz los pioneros que posibilitaron los primeros pasos de la Misión Salesiana y los primeros capítulos de la historia de Río Grande. Municipalidad de Río Grande”.

A pesar de las frases de ocasión, de las estatuas y toponimia, del acompañamiento social que han tenido los representantes de la comunidad indígena y de las esporádicas iniciativas en su favor, las imágenes que acompañan a este artículo tienen mayor contundencia que cualquier discurso. A los nativos fueguinos ni siquiera les dejaron la posibilidad de que perduren sus nombres y sus restos siguen siendo tratados con el mismo desprecio que en la época de las primeras coexistencias con los europeos, que pusieron fin a su próspera y milenaria existencia en unas pocas décadas.

 

Compartinos tu opinión

Te puede interesar

Últimas noticias

Fotos

Queremos invitarte a conocer Tierra del Fuego a través de sus maravillosos paisajes.

Invierno fueguino en 360°: Río Grande bajo la nieve

ver todas las fotos

Videogalería Ver más

Momentos TDF

Teclas de acceso