El titular del gremio a nivel local, Julio Ramírez, explicó que este año perdieron cerca de un 50% de trabajo. “Hay compañeros que no tienen ni para comer”, dijo.

El titular de la Unión Obreros de la Construcción de la República Argentina (UOCRA), Julio Ramírez, brindó esta mañana para Minuto Fueguino un oscuro análisis para lo que ha sido la actividad en el 2016: “Este año la construcción fue para atrás”.

Han perdido cerca de un 50% de fuentes de trabajo, en comparación con el 2015, y sostuvo que en las últimas horas mantuvo reuniones con el Gobierno provincial porque “hay compañeros que no tienen ni para comer”.

Optimismo a pesar de todo

Más allá de lo ocurrido en el transcurso del 2016, Ramírez se mostró esperanzado ante lo que pueda ser la reactivación de la construcción en el primer semestre de 2017, señalando que a partir del 5 de enero los obreros podrían comenzar a trabajar en el gasoducto de Tolhuin (una obra que emplearía a cerca de 80 trabajadores por 3 o 4 meses), así como también la licitación de la TOTAL, a partir del 20 de enero, y las obras que planifica el Instituto Provincial de la Vivienda.