Lucas Benvenuto, de 32 años, es conocido públicamente por haber hecho visible su historia como sobreviviente de abusos sexuales durante su infancia y adolescencia. En los últimos años se convirtió en una voz activa por los derechos de las víctimas y en un referente de resiliencia, especialmente a través de las redes sociales, donde comparte mensajes de contención y superación.

En 2020, su vida tomó un nuevo rumbo cuando fue convocado por el Club Andino Ushuaia para dictar clases de patinaje artístico sobre hielo. Para él, fue una oportunidad de recomenzar lejos del dolor del pasado y de dedicarse por completo a una de sus pasiones: enseñar. Sin embargo, cinco años después, esa experiencia terminó envuelta en conflicto.

Según relató en sus redes, Benvenuto habría sido apartado del club en circunstancias que considera discriminatorias. “¿Qué pensarías si te enteraras de que, después de 5 años de haber hecho felices a decenas de niños patinando, unas pocas mamis decidieran que por haber sido un sobreviviente, por haber sido un niño abusado, yo no puedo trabajar con niños?”, escribió en agosto pasado. En el mismo mensaje adelantó que podría iniciar acciones legales, al considerar que fue revictimizado y dañado económicamente.

El instructor afirmó que trabajó en condiciones precarias durante cinco años y que contribuyó al crecimiento del espacio deportivo. Sin embargo, aseguró que el conflicto surgió con cuatro madres integrantes de una subcomisión interna, con quienes tuvo diferencias sobre decisiones relacionadas con la actividad.

“Se metieron con mi integridad, con el niño que fui y con lo profesional que soy. Voy a iniciar acciones legales no solamente contra el club sino individualmente contra estas mujeres”, habría manifestado.

Según su testimonio, pocos días después de que esas madres enviaran una nota al club cuestionando su idoneidad para trabajar con menores, la institución le habría remitido una carta documento informando su desvinculación.

Benvenuto señaló que recibió el apoyo de varias de sus alumnas y adelantó que planea abrir su propia escuela de patinaje, con la intención de seguir enseñando en un entorno más justo y seguro.

Hasta el momento, el Club Andino Ushuaia no habría emitido declaraciones públicas sobre el caso.