La secretaria gremial de SOIVA Tierra del Fuego, Marcela Cárdenas, describió el complejo escenario que atraviesan los trabajadores de Blanco Nieve que permanecen dentro de la planta, donde llevan 47 días resguardando la infraestructura y las maquinarias, en un contexto marcado por el abandono empresarial y la falta de respuestas.

En diálogo con Minuto Fueguino, Cárdenas confirmó que en los últimos días se produjo el corte del suministro de gas, una situación que, si bien era esperada, agravó aún más las condiciones en las que se encuentran. “Era algo que nos imaginábamos que podía pasar en algún momento y llegó ese día: cortaron el gas”, expresó.

Según explicó, la deuda rondaría los cinco millones de pesos, motivo por el cual realizaron gestiones ante distintos organismos. “Salí a pedir ayuda, tanto a nivel municipal como provincial, para ver si se podía pagar la factura, aunque sea hacer una vaquita, pero no obtuve resultados”, señaló. No obstante, aclaró que recibieron asistencia desde el ámbito provincial para continuar funcionando de manera limitada. “Nos ayudaron desde la Secretaría Provincial con las garrafas, así que adaptamos la cocina a gas envasado, que es lo único que necesitamos para elaborar los alimentos”, indicó.

Respecto a las condiciones dentro de la planta, Cárdenas reconoció que la situación es crítica. “Sabemos cuánto dura una garrafa, somos austeros y cuidadosos. El ambiente está muy helado, pero es algo que vamos a bancar”, afirmó, remarcando que el gas se utiliza principalmente para cocinar y generar productos que luego son vendidos en la feria.

También confirmó que el servicio eléctrico estuvo en riesgo. “Quisieron cortar la luz, se pudo hablar para que no lo hagan, veremos hasta cuándo se puede estirar”, explicó.

Consultada sobre la situación legal y laboral, la dirigente gremial fue contundente. “No hay ninguna novedad, ni del dueño ni de nadie”, sostuvo, y recordó que ya llevan 47 días, camino a cumplir cincuenta, “resguardando esta infraestructura para poder cobrar el cien por ciento de la indemnización, que es lo que nos corresponde”.

Finalmente, Cárdenas apuntó directamente contra el propietario de la empresa y reclamó la intervención del Estado. “Acá hay un solo responsable. No puede dejar a 32 familias en la calle sin un centavo. Las autoridades tendrían que agarrarlo de la oreja y que no pueda mover ni una aguja de acá”, expresó, y concluyó: “Nosotros estamos acá pasando frío y adversidades porque queremos cobrar lo que es nuestro”.