El Concejo Deliberante de Río Grande avanza en la búsqueda de un marco normativo que regule la actividad de taxis, remises y plataformas digitales de transporte como Uber, con el objetivo de garantizar igualdad de condiciones para todos los trabajadores del sector.

El concejal Jonatan Bogado dialogó con Fm del Pueblo y explicó que se han mantenido reuniones con asociaciones de taxis, remiserías y conductores de Uber, con el fin de recabar información y propuestas para un proyecto unificado. “Nos venimos reuniendo con todos los sectores. El día viernes estuve con representantes de taxis, remises y Uber, y hemos logrado un avance significativo respecto de los insumos necesarios para regular la actividad”, aseguró.

Según Bogado, la meta principal de esta regulación es que cualquier persona que transporte pasajeros de manera remunerada cumpla con los mismos requisitos que los taxis y remises, incluyendo seguro, matafuegos, condiciones de salud y registro profesional. “Aquella persona que elija ser transportista debe cumplir los mismos requisitos que los taxistas y remiseros. No puede decidir operar fuera de la normativa”, enfatizó.

El concejal también subrayó la dimensión social del problema: muchas personas recurren a plataformas digitales para generar ingresos ante la falta de empleo o la dificultad de llegar a fin de mes. “No vamos a soltar la mano a ningún trabajador. Los que hacen Uber son trabajadores que necesitan subsistir, pero deben entender que los taxis y remises cumplen con todos los requisitos exigidos para garantizar un transporte seguro y salubre”, afirmó.

El debate en Río Grande refleja una problemática nacional. Según Bogado, varias ciudades del país, como Córdoba, Neuquén y Santa Fe, ya aprobaron regulaciones locales para plataformas digitales, aunque la mayoría aún carece de marco normativo. “Queremos que Río Grande sea una de las primeras ciudades en implementar una regulación clara que garantice equidad y seguridad para todos los sectores”, indicó.

Bogado también explicó que, más allá de la competencia entre Uber, taxis y remises, la disminución de la demanda de pasajes está vinculada con la situación económica local y nacional. “Cuando hay políticas nacionales que afectan la industria y el comercio, también impacta en el transporte de pasajeros. Hay menos demanda, y eso repercute en todos los trabajadores”, señaló.

Sobre la convocatoria reciente de taxistas y remiseros frente al Concejo, Bogado remarcó la necesidad de diálogo y respeto: “El Concejo Deliberante está abierto a recibir inquietudes, pero no a amenazas ni aprietes. Queremos construir soluciones juntos, de manera respetuosa”, afirmó, aclarando que cualquier intento de presión fuera de estos parámetros no tendrá respuesta favorable.

El próximo paso será evaluar toda la información recabada y definir si se presenta un proyecto unificado que contemple las demandas de todos los sectores, con el objetivo de garantizar un transporte seguro, equitativo y regulado en Río Grande.