Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido

Click aquí para activar las notificaciones y recibir las noticias directamente en su escritorio.

Ushuaia

Cruceros de 18 mil dólares y barrios sin servicios: la paradoja de Ushuaia según el NYT

Un artículo publicado recientemente en The New York Times puso en foco la creciente tensión que vive Ushuaia, capital de Tierra del Fuego, entre el auge del turismo de alta gama y la difícil situación habitacional que enfrentan miles de sus habitantes.

El reportaje, titulado “Tourists Flock to the End of the World. Locals Can’t Afford to Live There”, describe a Ushuaia como la ciudad que “vende el fin del mundo” y que, gracias a su cercanía con la Antártida, se ha convertido en la puerta de entrada al continente blanco. Esta temporada, más de 120.000 turistas embarcaron desde su puerto hacia el sur, muchos pagando entre 15.000 y 18.000 dólares por un crucero de lujo.

El artículo destaca que este crecimiento ha dinamizado la economía local y atraído inversiones, como el anuncio de la cadena hotelera Meliá para construir un complejo de cinco estrellas en la ciudad. Sin embargo, también señala los desequilibrios que esta bonanza genera: el aumento del costo de vida, la presión sobre los servicios básicos y la falta de acceso a la vivienda para los residentes permanentes.

La nota del Times pone como ejemplo a Nolly Ramos León, una trabajadora hotelera y madre soltera de cuatro hijos que vive en un asentamiento informal en la ladera de una montaña, sin acceso a agua corriente ni red eléctrica. Casos como el suyo reflejan una realidad que contrasta fuertemente con el perfil de los visitantes que llegan a bordo de cruceros de lujo y se alojan en los hoteles más exclusivos.

Según datos citados por el medio, un 10% de los habitantes de Ushuaia vive en barrios informales. Además, se estima que los alquileres han superado incluso a los de zonas premium de Buenos Aires, como el barrio de Palermo. En promedio, un departamento de dos ambientes puede costar hasta 1.000 dólares mensuales, lo que representa más del 80% del ingreso de muchas familias trabajadoras.

La cobertura también advierte sobre el impacto ambiental del turismo antártico. Cada visitante que viaja al continente blanco genera alrededor de cinco toneladas de dióxido de carbono. En paralelo, los efectos del cambio climático ya son visibles en la región: este verano, una formación glaciar del Parque Nacional Tierra del Fuego colapsó debido a las altas temperaturas.

Desde la Fundación Ushuaia XXI, su presidente Julio Lovece expresó en la nota que el desafío es encontrar un equilibrio. “Creemos que podemos recibir mucho más turismo, pero este es el momento adecuado para comenzar a diseñar algunas directrices que nos permitan no perder el control de este crecimiento”.

El artículo, que ya genera repercusiones a nivel local, vuelve a poner en agenda una discusión de fondo: cómo sostener el desarrollo turístico sin expulsar a quienes hacen posible la experiencia del “fin del mundo”.

Compartinos tu opinión

Te puede interesar

Últimas noticias

Fotos

Queremos invitarte a conocer Tierra del Fuego a través de sus maravillosos paisajes.

DJI_0453.jpg

ver todas las fotos

Videogalería Ver más

Momentos TDF

Teclas de acceso