
En el marco del paro por tiempo indeterminado convocado por la UOM, el secretario general de ASIMRA Río Grande, Javier Escobar, brindó un fuerte discurso frente a las puertas de la fábrica BGH, donde remarcó la necesidad de unidad entre los gremios y pidió que la CGT nacional convoque de inmediato a un paro general.
“¿Cómo no hermanarnos, cómo no ponernos al frente también de esta situación?”, abrió Escobar, aludiendo al impacto que tendrá la quita de aranceles anunciada por el Gobierno nacional. “No sólo vienen contra los metalúrgicos y los electrónicos, vienen a destruir toda la industria de Tierra del Fuego”, aseguró.
El referente sindical reveló que tras las primeras asambleas metalúrgicas mantuvieron comunicación con la UOM, y que fue el propio secretario general quien le aseguró que “estamos hermanados en la lucha”.
Durante su intervención, Escobar agradeció la presencia de Abel Furlán, secretario general de la UOM nacional y secretario del Interior de la CGT, y le pidió “trasladar a la CGT que necesitamos urgentemente que tome cartas en el asunto con un paro nacional”.
“Esto no es solo por Tierra del Fuego”, advirtió. “Están arrodillándose ante el poder económico de Estados Unidos y de China. Vienen a destruir nuestra mano de obra para favorecer a sus amigos, como Mercado Libre, que es subsidiada con millones de dólares mientras dicen que generan software, pero el software se genera acá, en nuestras fábricas, con trabajo real”.
El dirigente también hizo un llamado a los representantes políticos de la provincia: “Les exigimos a quienes se sientan en las bancas que se pongan el saco, que se la jueguen, porque no se puede seguir entregando el futuro de nuestra gente. No podemos permitir que vendan esta provincia por un par de votos en el Congreso”.
En un tramo especialmente emotivo, Escobar apuntó contra el diputado libertario Santiago Pauli, sin mencionarlo por nombre: “Mi viejo estaría avergonzado de que alguien que lleva su apellido esté entregando a la provincia donde él caminó, sudó, lloró y laburó para que hoy exista todo esto”.
Finalmente, hizo un llamado a la autocrítica dentro del sindicalismo y a la unidad: “Tenemos que ser humildes, reunirnos los dirigentes, decirnos las cosas en la cara, pero no dividirnos. La gente que representamos no se merece que nos equivoquemos. Hoy no hay margen para errores. Unidos y en lucha, compañeros y compañeras”.
Compartinos tu opinión