La eliminación de las retenciones al petróleo convencional comenzó a reconfigurar el mapa energético argentino. El trasfondo de la medida es la necesidad del Gobierno nacional de buscar aliados legislativos para aprobar el Presupuesto 2026.
Con Chubut como la primera provincia en firmar el acuerdo con la Nación, ahora Santa Cruz, Neuquén y Mendoza se preparan para sumarse a un esquema que busca recuperar la competitividad del segmento tradicional de la industria. En paralelo, Río Negro y Tierra del Fuego mantienen el diálogo abierto, aunque con demandas políticas propias y tiempos menos urgentes.
Qué implica el acuerdo con Nación por el petróleo convencional
La medida apunta a un sector que viene perdiendo terreno frente al avance del shale, y que hoy requiere incentivos fiscales para sostener actividad, empleo y perforaciones.
Según el último reporte estadístico del IAPG de septiembre pasado, la producción total de petróleo de Argentina convencional y no convencional (shale) acumuló 132.575 metros cúbicos (unos 833.807 barriles de petróleo diarios), de los cuales 87.583 m3 (550.000 barriles) son no convencional y 44.992 m3 (282.000 barriles) son convencionales. En octubre la cifra total oficial subió por encima de 850.000 barriles.
El pacto implica un acuerdo de la provincia de bajar regalías, del Gobierno nacional de bajar retenciones y de los trabajadores (gremios) para firmar una agenda de competitividad.
Las nuevas condiciones eliminan las retenciones cuando el barril cotice por debajo de los u$s65, establecen una escala del 0 al 8% entre u$s65 y u$s80, y mantienen una alícuota del 8% por encima de ese nivel.
Los compromisos asumidos incluyen:
-Estado Nacional: adecuar el régimen de derechos de exportación avanzando en la quita de retenciones al crudo convencional.
-Provincia: ratificar y profundizar sus políticas de acompañamiento mediante la revisión de regalías y cánones.
-Empresas: sostener la producción y los planes de inversión necesarios para garantizar la continuidad de la actividad.
Chubut, la primera en firmar el acuedo
El Gobierno anunció la firma del acta de entendimiento con la provincia de Chubut para eliminar las retenciones al petróleo convencional de la Cuenca Golfo San Jorge, con el objetivo de preservar la actividad en cuencas maduras, dar previsibilidad a las inversiones ante un fuerte declino de la producción y para cuidar el empleo sectorial, que busca mejores oportunidades en el shale de Vaca Muerta.
El acuerdo lo sellaron en el Palacio de Hacienda el jefe de Gabinete, Manuel Adorni; el ministro de Economía, Luis Caputo; el ministro del Interior, Diego Santilli; el gobernador de Chubut, Ignacio Torres; el secretario de Coordinación de Energía y Minería, Daniel González; y el presidente de la Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH), Carlos Ormachea.
“Va a ser muy bueno para la Argentina, porque necesita producir más crudo pesado, eso es más trabajo", dijo Torres días antes de la firma. “Me animaría a decir que es histórico, por lo menos para Chubut: la parte empresarial, los trabajadores, la provincia, el municipio y la Nación avanzamos en una agenda común para generar más trabajo”, agregó el gobernador chubutense.
Río Negro: conversaciones avanzan, pero el acuerdo aún no está cerrado
A diferencia de Santa Cruz o Mendoza, Río Negro no confirmó ni descartó su adhesión inmediata. La provincia, que produce cerca de 21.000 barriles por día (el 2,8% del petróleo nacional), evalúa el impacto fiscal y las condiciones políticas del acuerdo.
El gobernador Alberto Weretilneck mantuvo reuniones en Buenos Aires con el ministro del Interior, Diego Santilli, y con el jefe de Gabinete, Manuel Adorni, donde se discutió infraestructura clave (rutas nacionales, Tren del Valle), apoyo presupuestario a INVAP, y la agenda de reformas laborales y tributarias.
Si bien la producción convencional de Río Negro no es dominante dentro de la Cuenca Neuquina, el alivio impositivo podría sostener operaciones maduras y acompañar el impulso que generará el proyecto Vaca Muerta Oil Sur.
Tierra del Fuego: el caso más político y el más lento en decidir
En Tierra del Fuego, el gobernador Gustavo Melella se muestra reticente a firmar un acuerdo político con el gobierno nacional. La provincia viene registrando una caída sostenida en su producción convencional, que hoy ronda los 10.400 barriles diarios, muy lejos de los niveles de 2018 (22.000 barriles/día).
El escenario cambió parcialmente con la noticia de que YPF traspasará sus áreas a la petrolera provincial Terra Ignis a partir del 1º de enero de 2026. Melella celebró el hito como “un antes y un después para la soberanía energética fueguina” y afirmó que el traspaso garantiza continuidad operativa y laboral.
Con ese nuevo tablero, la provincia negocia desde otro lugar. La baja de retenciones podría ser un incentivo adicional, pero Melella no tiene apuro en firmar: busca asegurarse recursos y acuerdos políticos antes de sellar su apoyo.
La eliminación de retenciones al crudo convencional se está convirtiendo en una de las decisiones más relevantes del año para las provincias productoras.
Si Santa Cruz, Neuquén y Mendoza formalizan su adhesión en los próximos días, el país tendrá un bloque mayoritario comprometido con reactivar pozos maduros, sostener empleo y dinamizar inversiones.
Río Negro y Tierra del Fuego completan un tablero donde cada provincia juega su propia estrategia, pero todas comparten un objetivo central: evitar el declive del convencional mientras el shale sigue creciendo.
Compartinos tu opinión